Cajamar y Ruralcaja inician contactos para una posible fusión
La primera caja rural de España, Cajamar, y la segunda, el grupo CRM encabezado por la valenciana Ruralcaja, han mantenido contactos informales para avanzar en la creación de un grupo con más de 40.000 millones en activos, según fuentes financieras consultadas por Efe.
Cajamar ha reconocido que una operación de este calado tendría importantes ventajas para ambas entidades, al tiempo que ha recordado que su estrategia en los últimos años ha pasado por integrar varias entidades.
No obstante, la caja almeriense ha asegurado que "a fecha de hoy" no ha habido "conversaciones formales" para unirse con el grupo CRM, que ha añadido que sus órganos de dirección "no han estudiado ni decidido nada" respecto a la eventual unión con Cajamar.
En cualquier caso, las fuentes financieras consultadas han insistido en que los distintos contactos que ha habido en las últimas semanas entre Cajamar y CRM son un ejemplo de que ambas entidades han empezado a considerar las "ventajas" de unirse.
Las mismas fuentes consideran que Cajamar aprovecharía la absorción de CRM para "frenar el deterioro de su balance y cuenta de resultados con los distintos instrumentos contables a su disposición".
Al mismo tiempo, CRM, con una morosidad próxima al 12,6 %, vería mejorar sus principales ratios, inusuales en un sector prudente como el de las cajas rurales.
Hasta que se vislumbre si los primeros contactos entre las dos entidades dan paso a negociaciones más formales que avancen hacia una fusión, lo único seguro es que CRM ha instado en los últimos meses al grupo Caja Rural, del que forma parte, a constituir un SIP "reforzado".
Con ese SIP, las cooperativas del grupo Caja Rural compartirían el 100 % de sus resultados además de solvencia, como han hecho las cajas de ahorros y conforme al modelo actual de la propia CRM, que integra ya 14 entidades.
Esa estructura, que propone al Banco Cooperativo Español como líder del proyecto, unificaría servicios de apoyo y permitiría ahorrar costes, al tiempo que preservaría la personalidad de cada entidad y sus marcas locales.
A principios de año, en un comunicado, el grupo Caja Rural ya explicó que se comprometía a reforzar su modelo de banca cooperativa a semejanza del de otros países europeos, incrementando sensiblemente los compromisos y apoyos mutuos.
Sin embargo, con el paso del tiempo esto no ha llegado y la situación económica no ha hecho más que empeorar por lo que, según las fuentes financieras, algunos directivos de CRM se habrían podido plantear la alternativa de unirse a Cajamar.
Ante esta opción, varias fuentes financieras consideran que lo más fácil sería que el propio grupo Caja Rural participara con sus fondos en el saneamiento de CRM en el caso "poco probable" de que la situación degenerara hasta tal punto de ser necesaria.
En ese supuesto, el grupo Caja Rural podría participar en la toma de las decisiones que fueran oportunas para hacer viable a CRM.