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Nombramientos con carácter provisional

Rubalcaba liderará al PSOE en el Congreso y Marcelino Iglesias será portavoz en el Senado

La ejecutiva del PSOE propuso ayer que Alfredo Pérez Rubalcaba presida el grupo socialista en el Congreso y replique a Mariano Rajoy en el debate de su investidura, mientras que el secretario de Organización socialista, Marcelino Iglesias, será el portavoz en el Senado.

Estos nombramientos tienen carácter provisional, ya que la dirección saliente del 38 Congreso Federal del PSOE, que se celebrará en Sevilla del 3 al 5 de febrero, deberá decidir si los ratifica o no. El exministro de Trabajo Jesús Caldera será el encargado de coordinar la redacción de la ponencia marco de ese congreso, en tanto que Iglesias se ocupará de la dedicada al modelo de partido.

Precisamente, Caldera, junto con otros dirigentes como Cristina Narbona y Valeriano Gómez, formó parte del equipo designado por Rubalcaba para diseñar el programa electoral con el que el PSOE concurrió a las urnas el 20-N.

Los grupos parlamentarios se constituirán el miércoles a las 9.30 horas en una reunión en el Congreso, tal y como anunció ayer Iglesias tras la ejecutiva, a la que no asistió el líder del partido, José Luis Rodríguez Zapatero.

Según Iglesias, todo el mundo está de acuerdo en que sea Rubalcaba el que se enfrente a Rajoy en el debate, toda vez que ha sido el candidato al 20-N. Ante las interpretaciones de que la decisión podría beneficiar a Rubalcaba en su hipotética carrera por la Secretaría General del PSOE, fuentes socialistas precisaron que la ministra Carme Chacón no ha puesto ningún impedimento a los nombramientos ni al hecho de que sea él quien intervenga en la sesión de investidura de Rajoy.

Tampoco Iglesias cree que eso suponga una ventaja respecto a aquellos que decidan presentarse para liderar el partido, entre ellos la ministra de Defensa en funciones, Carme Chacón, cuya participación en esa pugna se da por segura. Iglesias salió en defensa de Chacón al subrayar que tiene demostrada su lealtad a España, en respuesta a las declaraciones del presidente del Congreso, José Bono, y del diputado Alfonso Guerra, quienes pusieron en duda que el PSC pueda designar a uno de sus miembros para liderar el partido puesto que los socialistas catalanes "llevan demasiado tiempo diciendo que no son del PSOE".

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