Gerentes de hospitales frente a la crisis
Poca flexibilidad en el modelo laboral, recortes en gasto sanitario, deudas con los proveedores... Los directores, en la encrucijada.
La crisis ha golpeado en el modelo sanitario español, uno de los más baratos -en relación a su eficiencia- del mundo. Las comunidades autónomas, que asumen las competencias de salud, han visto mermar sus ingresos fiscales, lo que ha provocado menos recursos para gastar. Y la sanidad se lleva alrededor de un tercio de esos presupuestos. Una de las patas del sistema, los hospitales, está sufriendo gran parte de esa falta de recursos, aunque tengan que mantener el mismo nivel de calidad y la cartera de servicios.
¿Qué pueden hacer los gerentes de los hospitales españoles ante semejante dilema? ¿Tienen herramientas para gestionar falta de recursos en sus centros?
Esas preguntas las intentaron contestar 60 directores de hospital hace unos días en el seminario El reto directivo de gestionar un sistema sanitario en crisis, un encuentro anual que ha celebrado su séptima edición y que organiza la compañía farmacéutica Novartis.
Los gerentes se están encontrando numerosos problemas. El primero, los recursos humanos. Los responsables de las comunidades autónomas han tomado la decisión de controlar los gastos de personal al máximo, lo que provoca que haya menos sustituciones y no se cubran las bajas y las jubilaciones. "En los centros sanitarios y hospitales, básicamente un 65% del presupuesto está destinado al personal, por tanto, un ajuste en sus cuentas afecta ineludiblemente a la plantilla", explica Xavier Corbella, coordinador del seminario y director gerente del Hospital Universitario de Bellvitge.
Cataluña está siendo, de momento, la punta de lanza del control del gasto. Boi Ruiz, a las semanas de tomar el cargo como consejero de Salud de la Generalitat, anunció un recorte de un 10% en los presupuestos sanitarios. Algo que inmediatamente se trasladó a los gerentes hospitalarios, que tuvieron que aplicar un ajuste en su gasto anual. Los sindicatos revelaron que eso suponía cierres de quirófanos, un menor número de camas disponibles, la no renovación de los contratos temporales y el aumento de las listas de espera.
Ayer y el martes, el personal ha realizado una huelga en su lucha contra estos recortes, convocado por el Sindicato de Médicos de Cataluña. "El reto principal es el ajuste presupuestario, es decir, los centros se ven obligados a cumplir con su actividad, tanto en volumen como en calidad, con una reducción en el presupuesto anual", reconoce Corbella.
Precisamente los sindicatos temen que algunas regiones, tras las elecciones del 20-N, tomen la decisión de aplicar la tijera. Un solución que no resuelve los problemas de las comunidades, que deben más de 5.800 millones de euros en pagos hospitalarios a las farmacéuticas (con una demora media de 468 días), según Farmaindustria, y que tienen facturas impagadas a 30 de septiembre por valor de 4.740 millones de euros a los proveedores de tecnología sanitaria, según su patronal Fenin.
Además, los gerentes reunidos en este seminario encuentran como una dificultad añadida la rigidez de un personal asimilado al funcionariado del que cree que se puede ganar eficiencia. Corbella apunta que en los años de bonanza el gasto sanitario aumentó (hasta el 9% del PIB, colocándose en la media de la OCDE), "y sin embargo se redujo la productividad". Otro de los problemas al que los gerentes se enfrentan es el de los diferentes modelos: público 100%, empresas públicas, fundaciones, de gestión privada, conciertos... ¿Cuál es el mejor? Por eso, reclaman estudios de eficacia sobre la salud de estos centros.
César Pascual. Hospital Marqués de Valdecilla: "Después de la crisis nada va a ser igual"
Tiene claro que todo va a cambiar, o debería, tras la recesión. "Después de la crisis nada va a ser igual en la sanidad", cree César Pascual, director gerente del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (Santander), empezando por la gestión de los recursos humanos."En este escenario, los modelos actuales no nos valen. Tenemos enormes rigideces en los presupuestos, en el personal y en el modelo MIR, a lo que hay que sumar el envejecimiento de la fuerza laboral en los hospitales y su jubilación en los próximos años", asegura. "Ya no son válidas fórmulas tradicionales de contratación, pero tampoco los perfiles profesionales actuales ni las rigideces contractuales que la legislación impone".Reconoce que ante la actual coyuntura, los hospitales han bajado la intensidad en cubrir las sustituciones de empleados y está reconsiderando "la carga de trabajo" de los profesionales, también en lo relativo a la docencia y a la investigación.Para Pascual, es necesario actualizar el modelo de relaciones laborales en los hospitales: "¿Dónde está escrito que los profesionales no pueden trabajar por la tarde o los sábados? En ningún sitio". Le gustaría un modelo mucho más flexible, más parecido a los nuevos modelos de sanidad pública gestionada por empresas privadas, donde se prime la eficiencia de los empleados y se recompense por ello. Además, piensa que se deberá empezar a gestionar el talento, en una lucha por atraer y premiar a los mejores.
Xavier Corbella. Hospital de Bellvitge: "Debemos hacer un pacto con las farmacéuticas"
El futuro del sistema público, opina Xavier Corbella, merece un debate sobre el modelo de financiación. "Intuimos que en el modelo actual, un presupuesto asignado a cada centro por cada Gobierno regional irá cambiando. La forma de financiar los hospitales se asemejará más a una empresa o a un sector de mercado"."Necesitamos un cambio basado en la efectividad de lo que hacemos. Hay que evaluar la eficacia respecto a los costes, si las técnicas que aplicamos a los pacientes son las mejores. Debemos también compartir servicios y profesionales con otros hospitales y con la atención primaria. Y, sobre todo, debemos hacer una alianza con las farmacéuticas para compartir riesgos. Solo pagaríamos lo que verdaderamente funcione", detalla.Confiesa que últimamente ve a los jefes de servicio preocupados por la sostenibilidad del sistema, "buscan ahorros porque están más sensibles a perder a gente de su equipo". Apunta también a otra de las claves que debería introducirse, una radiografía del sistema, tanto del modelo de las diferentes comunidades autónomas como de los hospitales. "Hay que hacer una evaluación sobre la salud, porque no la tenemos". Incluso para comprobar si hospitales públicos de gestión privada, por ejemplo, cuentan con mejores resultados para los pacientes.
José Manuel González Álvarez. Hospital de Pontevedra: "Es tiempo de gestores valientes"
"En primer lugar, deberíamos definir la cartera de servicios, convenientemente financiada, para todo el Sistema Nacional de Salud", aclara José Manuel González Álvarez, director gerente del Complejo Hospitalario de Pontevedra. Piensa que a la vez debe haber muchas reformas dentro de los centros: la relación con los recursos humanos, donde debe existir más flexibilidad, una política farmacéutica común en todas las comunidades o más colaboración con los proveedores para que se conviertan en socios. "Es tiempo de gestores valientes".Tiene clara la circunstancia actual: "Debemos gestionar más cosas con menos dinero". Por lo que hay que buscar ahorros. Por ejemplo, se abren oportunidades para un análisis del coste-eficiencia de fármacos y tecnologías, siempre con la decisión última del facultativo, porque "son decisiones muy delicadas".En este sentido, afirma que mucho de lo que se vende como innovación terapéutica, al final no merece la pena, por eso hay que analizar su uso según los estudios clínicos que existan.Y el médico también puede aportar muchos ahorros al sistema: "Debe ser consciente de que sus decisiones clínicas tienen un impacto. Hay que implicar a nuestros profesionales en la gestión clínica, no solo en la prestación de servicios sanitarios, sino corresponsabilizándose con los recursos humanos y económicos".