Nuevos timos en los cajeros
Los delincuentes deben tirar de imaginación cuando preparan algún palo en un cajero automático. Hasta la fecha, su forma favorita de robo era el skimming o copia de la banda magnética de la tarjeta. Pero la introducción en Europa de un chip encargado de procesar los datos en los plásticos ha bloqueado esta estafa. Un informe recién publicado por el Observatorio Europeo de la Seguridad en los Cajeros Automáticos (EAST) apunta cómo, ante la dificultad para falsificar tarjetas, los criminales ahora bloquean el cajero para impedir la entrega de dinero. En el primer semestre del año se han producido 11.220 ataques por esta vía en seis países de la UE, frente a los 6.649 ocurridos en el mismo periodo de 2010. Eso sí, ha bajado el dinero estafado de un año para otro: de 144 millones de euros a 122 millones.