Japón interviene en el mercado de divisas para debilitar el yen
Japón ha intervenido en el mercado de divisas de forma unilateral para debilitar el yen, pocas horas después de que la moneda local marcara un nuevo récord frente al dólar estadounidense.
el ministro de Finanzas, Jun Azumi, evitó comentar el montante de la operación, que se produjo después de que el yen se intercambiara con el dólar de EEUU en un máximo histórico de 75,32 yenes, informó la agencia Kyodo.
Tras la operación, la segunda de este tipo desde el pasado agosto, el yen bajó un 4% hasta las 78 unidades frente al dólar en el mercado de Tokio.
"Desde hace tiempo veíamos que continuaban los movimientos especulativos que no reflejan la economía de nuestro país, por eso decidimos intervenir", indicó Azumi.
El titular de Finanzas añadió que Japón intervendrá en el mercado de divisas para depreciar el yen "las veces que haga falta".
La fortaleza del yen frente al euro y el dólar perjudica seriamente a las compañías exportadoras de Japón, pilar de la economía japonesa, ya que pierden competitividad y beneficios en el exterior a la hora de repatriarlos. La moneda japonesa también se ha movido en niveles muy fuertes frente al euro, que a primeros de este mes tocó su nivel más bajo frente al yen en diez años al intercambiarse a 100,96 unidades en Nueva York.
Tras la intervención, en la que se vendió un monto no detallado de yenes por dólares, el euro se intercambiaba en torno a los 107 yenes.
Es la cuarta intervención de Japón en el mercado de divisas desde septiembre del año pasado, cuando vendió dos billones de yenes (18.656 millones de euros) para abaratar la moneda local.
A aquella operación le siguió otra en marzo, tras el terremoto que asoló el noreste de Japón, de forma conjunta con el G7, de nuevo para debilitar el yen y facilitar la recuperación de la economía local.
El pasado agosto el Gobierno volvía a intervenir de forma unilateral con una operación de 4,51 billones de yenes (42.060 millones de euros), para tratar de contrarrestar la fortaleza de la moneda local frente al dólar estadounidense y el euro, debilitados por las inciertas perspectivas económicas y la crisis de deuda en Europa.