La crisis pasa de puntillas sobre ellos
Mientras los mercados y gran parte del mundo miran a Europa con la esperanza de que se solucionen los problemas de deuda, un selecto club permanece al margen de la convulsa situación. Son los súper ricos que no solo han aumentado en los últimos años sino que han contribuido a que la industria del lujo viva su momento gloria.
En un momento de crisis en el que el consumo, el crédito y los ingresos se han restringido considerablemente, las familias tratan de apretarse el cinturón para poder llegar a fin de mes. Según la encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística un 26,1% de los hogares presenta problemas para hacer frente a sus pagos. Sin embargo, algunos parecen capear esta situación con menos dificultades y sus bolsillos lejos de adelgazar lo que hacen es engordar día a día.
Es el caso de los grandes patrimonios, es decir, aquellas personas con activos financieros de al menos un millón de dólares, excluyendo la primera vivienda y los consumibles. Según el 15 informe anual sobre Riqueza en el Mundo, publicado por Merrill Lynch Global Wealth Management y Capgemini, en el año 2010 el número de particulares con grandes patrimonios, así como su riqueza, aumentaron respecto al 2009. Con este nuevo ascenso, que sitúa el número de grandes fortunas en los 10,9 millones de personas, son ya dos años consecutivos de alzas, superando incluso los niveles anteriores al estallido de la crisis.
No obstante, la homogeneidad no es la característica que acompaña al crecimiento de las grandes fortunas. Según los datos que se desprenden del informe elaborado por Bank of America, los mayores repuntes tuvieron lugar en las regiones de Asia-Pacífico, es decir, en las denominadas economías emergentes que ya han superado las cifras de crecimiento de Europa tanto en número de personas como en la riqueza de las mimas. En el lado opuesto se encontraría España, país en el que los grandes patrimonios descendieron un 2,1% pasando de las 143.000 personas en 2009 a las 140.000 de 2010. Este descenso supone una caída de dos posiciones en el ranking global de los países con mayores patrimonios, ocupando la decimocuarta plaza.
La tendencia alcista también se repite para los patrimonios muy elevados que son aquellos ciudadanos que poseen activos financieros de más de 30 millones de dólares. Aunque estas grandes fortunas continúan concentradas en EE UU, Japón y Alemania (el 53%) las economías emergentes están pisando fuerte.
Esta bonanza económica para los ricos tiene su reflejo más inmediato en el mercado de los artículos de lujo. A comienzos de esta semana el consejero delegado de Rolls-Royce, declaró a Atomotive News que la compañía se muestra optimista con el nivel de facturación ya que el número de súper ricos crece día a día. Hace un año la empresa vendió 2.711 coches, cifra récord, y prevé que para 2011 la supere.
El sector automovilístico de alta gama es quizá uno de los más representativos de esta tendencia. Pese a que las matriculaciones en España han caído a niveles de 1998 el mercado del motor de lujo ha crecido un 112%.
Pero no solo los coches caros son los artículos de lujo que han experimentado un crecimiento espectacular. Según el Estudio del Mercado Mundial de Lujo de Bain&Company las ventas de los objetos de alta gama continúan este año con el repunte experimentado en 2010 y de acuerdo a las últimas previsiones en 2011 se incrementarán un 10% hasta los 191.000 millones de dólares.
Dentro de este segmento, las joyas y los zapatos encabezan la lista -suben un 13%- porque son los primeros artículos que escoge la gente que entra a formar parte del selecto club de los más adinerados. A ellos le siguen la ropa (8%) y los perfumes y cosméticos (3%).
Por regiones los mercados maduros, es decir, Europa y América siguen siendo los más importantes, aunque los que se encuentran inmersos en un proceso de desarrollo son el principal foco al dirigen sus miradas las grandes empresas. China con su espectacular crecimiento y el aumento del gasto de sus habitantes representa el 20% del mercado del lujo.