Santander reafirma la validez de su modelo para capear la crisis financiera
El grupo se ve solvente y con liquidez. Mantiene su política de dividendos y descarta ampliar capital.
No hubo sorpresas, recetas mágicas ni grandes novedades en el encuentro que mantuvo ayer Santander en Londres con analistas e inversores. La cita estaba cargada de significado. No en vano, se trataba del primer Día del Inversor que celebra el grupo desde que en 2007 estallara la aún vigente crisis financiera. Por ello, el banco desplegó toda su artillería. Al encuentro acudió la plana mayor del grupo al completo.
Alfredo Sáenz, consejero delegado de la primera entidad financiera española, cogió el toro por los cuernos nada más empezar su ponencia. "El entorno actual reivindica nuestro modelo de negocio", afirmó ante 300 analistas e inversores. Acto seguido indicaba que la estrategia del grupo se fundamenta en "un crecimiento sostenible, un perfil de riesgo bajo y diversificado, así como en obtener mejores resultados que los principales rivales tanto en los buenos tiempos como en los malos".
El directivo señaló como meta regresar en tres años a niveles de rentabilidad sobre el capital (ROE) de entre el 12% y el 14%. Actualmente, esta ratio se sitúa en torno al 9%. La intención es recuperar en 2014 los beneficios que cosechaba en los tiempos de bonanza económica. En 2007, anotó unas ganancias récord de 9.000 millones de euros.
Una persona presente en el encuentro apuntó ayer que "las estimaciones del ROE están en línea con el consenso del mercado y tampoco es sorprendente su previsión de regresar a la normalidad de beneficios en tres años".
Santander se siente cómodo con su nivel de capitalización, que espera mantener entre el 9% y el 10% en los próximos ejercicios, así como de liquidez. Sáenz recordó que si bien el grupo tiene como regla actuar de forma integrada en cuestiones operativas, cada filial es financieramente autónoma y esto limita su perfil de riesgo. Gracias a esto, declaró, "el conjunto vale más que la suma de las partes".
El consejero delegado descartó que Santander vaya acometer en un futuro próximo ninguna ampliación de capital e insistió en que se mantendrá la retribución al accionista (pay-out) en el 50% del resultado. Su intención es permitir a los inversores reinvertir los dividendos en nuevas acciones dos veces al año (scrip dividend).
Los responsables del grupo no hicieron mención alguna a una revisión general del balance o de actividades. En este punto, Santander nada contracorriente. Varios bancos internacionales han decidido recientemente importantes procesos de desapalancamiento o discontinuación de líneas de negocio -sobre todo de banca de inversión- para reforzar sus ratios de capital. Para un analista, "el hecho de que Santander no haga anuncios y no necesite una limpieza de balance es casi una buena noticia".
Pero esta opinión no es compartida por todos los expertos que acudieron a las ponencias celebradas con motivo del Día del Inversor. Otro analista juzgaba ayer que "ha faltado un mensaje significativo de cambio de estrategia. No ha habido anuncios de ventas ni se refuerza el balance. Da la sensación de que se ha optado por un plan de subsistencia en estado puro". Este crítico experto fue más allá al agregar que "al grupo todavía le faltan 10.000 millones de euros de capital para acercarse a los estándares de Reino Unido o Suiza. Vienen tiempos difíciles con la aplicación de las normas internacionales de solvencia de Basilea III y el ruido de recesión".
La intención de Santander, indicó Alfredo Sáenz, es crecer por distintas vías en los mercados emergentes (América Latina y Polonia) que en los maduros (Península Ibérica, Reino Unido, EE UU y Europa continental). Las filiales ubicadas en economías desarrolladas tendrán por misión liberar capital que permitirá mantener el nivel del dividendo así como sostener el crecimiento en los países emergentes.
El grupo subió ayer en Bolsa un 1,66%, si bien la acción aún pierde casi un 20% en lo que va de año.
Pilares del negocio
Las claves del modelo de banca de Santander son:1. La diversificación de negocio entre economías maduras y emergentes.
2. Posición dominante en aquellos países donde se tiene trabaja. El banco opera en 10 grandes mercados. La presencia global permite sacar partido de la conectividad internacional.
3. La banca minorista y comercial presenta un perfil de riesgo más bajo. Además, se mantiene una política de costes austera.
4. Filiales autónomas en términos de capital y liquidez para evitar contagios, pero con un modelo operativo centralizado para aprovechar las economías de escala.
Objetivo: ser líder por rentabilidad
La entidad que preside Emilio Botín ha aprovechado la crisis para crecer a golpe de talonario en Reino Unido. Las prioridades ahí son integrar las oficinas de RBS, optimizar un balance que permanecerá previsiblemente plano y mejorar la atención al cliente.Varios inversores presentes en la reunión indicaron que el grupo ha rebajado sus expectativas de rentabilidad en ese país a corto plazo. De hecho, Santander cree que puede mejorar el desarrollo de su plataforma informática y cosechar ahorros de 184 millones de euros en dos años. Reforzará las inversiones para convertirse en el banco más rentable de Reino Unido en 2014. Sáenz recordó que Santander UK no saldrá a Bolsa hasta 2013 o 2014, como pronto.
Para 2014 el banco quiere ganar tres millones de cuentas corrientes y duplicar, hasta tres millones, su parque de tarjetas de crédito.
25 millones de clientes tiene Santander en Reino Unido. Desea segmentarlos de cara a potenciar la venta cruzada.
Brasil. Más clientes, mayor fidelización y una marca más reconocida
Después de tres años de trabajo, Santander ha completado con éxito la asimilación de Banco Real y la integración informática de su filial de Brasil. Sin embargo, reconoce como tareas pendientes anotar un crecimiento mayor que la media del mercado y lograr una convergencia en términos de rentabilidad.De aquí a 2014, la intención del grupo es intensificar su relación con los clientes, potenciar la venta cruzada, lanzar ofensivas comerciales en segmentos clave y reforzar su imagen de marca, todo dentro de un marco de gestión prudente del riesgo.La entidad pretende ganar un millones de clientes particulares en los próximos dos años, hasta alcanzar los 10 millones. También quiere captar 250.000 pymes, de forma que para 2014 trabaje con 800.000.
México, Argentina, y Chile. Consolidar las posiciones de las franquicias hispanoamericanas
Santander se ha propuesto como meta sacar el mayor partido a sus filiales hispanoamericanas, un área que a juicio de los analistas se muestra "fuerte".En México, la intención es anotar incrementos de dos dígitos en sus beneficios con mejoras de la eficiencia. Planea potenciar la venta cruzada de productos a sus distintos segmentos de clientes, cosechar incrementos anuales del crédito hipotecario superiores al 15% así como anotar aumentos del 31% del negocio con pymes.En Chile, el grupo espera incrementar su impronta en banca comercial y anotar subidas de dos dígitos en el resultado operativo de particulares, banca personal y pymes.Las pautas a seguir en Argentina son parecidas. El banco se ha propuesto aprovechar la fuerza de su franquicia para sacar el mayor rendimiento del incremento del crédito y de la base de clientes en el país.