Merkel logra salvar el fondo de la zona euro sin poner en peligro su coalición
El Parlamento alemán aprobó ayer por una abultadísima mayoría (85%) la ampliación del fondo de rescate de la zona euro y la concesión a ese instrumento de nuevos poderes de intervención. La votación supuso un alivio para la zona euro y deparó una victoria personal a Angela Merkel, que solo sufrió 15 deserciones entre los parlamentarios de su coalición gubernamental.
El euro ha estrechado tanto los lazos políticos y económicos entre sus socios que una canciller alemana se jugó ayer su futuro en una votación aparentemente relacionada solo con Grecia, Portugal o Irlanda. Y por suerte para Angela Merkel, el Bundestag respaldó por 523 votos a favor, 85 en contra y tres abstenciones, la reforma del fondo utilizado para rescatar a esos países.
La aprobación en Alemania de los cambios previstos en la dotación y facultades del fondo (conocido como Facilidad Europea de Estabilidad Financiera) estaba prácticamente garantizada, porque Merkel podía contar con los votos de gran parte de la oposición (Socialistas y Verdes). Pero permanecía la duda sobre la capacidad de la canciller para contener la creciente rebelión entre las filas de su propia coalición gubernamental (conservadores y liberales).
En las semanas previas a la votación se calculaba que casi medio centenar de diputados de esos dos partidos podrían votar en contra de la propuesta, lo que hubiera dejado a Merkel en una posición de extrema fragilidad al y en peligro de disolver la coalición o convocar elecciones anticipadas.
Pero la intensa campaña llevada a cabo por la canciller y por su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ha logrado mantener la unidad. Y ayer, solo 15 diputados de la mayoría gubernamental (11 conservadores y 4 liberales) se desmarcaron de la votación en bloque a favor de la reforma del fondo. Durante la sesión parlamentaria, según la crónica de Reuters, las intervenciones de los escasos disidentes fueron acogidas con gran frialdad por sus correligionarios. Y la canciller logró el apoyo de 315 de sus diputados, es decir, suficientes para sacar adelante el proyecto sin necesidad de la oposición.
El resultado supuso un gran alivio, siquiera momentáneo, tanto para Berlín como para el resto de capitales de la zona euro, desde París a Atenas o Bruselas, donde se contemplaba con pavor la posibilidad de una crisis política en Alemania o el bloqueo indefinido de la reforma del fondo.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, calificó la votación en el Bundestag como "un paso muy importante" para la estabilidad de la zona euro. Y la Comisión Europea mostró su esperanza en que el proceso de ratificación en los 17 países de la zona euro concluya a mediados de octubre.
Con Alemania ya son 11 países (incluida España) los que han concluido el proceso. Pero entre los seis pendientes figura el peligroso escollo de Eslovaquia, un país que ya se negó a participar en la primera operación de rescate de Grecia y donde buena parte de la opinión pública rechaza tajantemente prestar ayuda a países más ricos que el suyo.
Obstáculos pendientes
La primera ministra, Iveta Radicova, anunció ayer que someterá el proyecto a votación cuando los otros 16 países ya hayan ratificado, lo que podría aumentar la presión sobre los parlamentarios eslovacos. La táctica de acorralamiento, sin embargo, ya ha fracasado otras veces en asuntos comunitarios, como en la frustrada ratificación en Irlanda de los tratados de Niza y de Lisboa.
Pero ni siquiera el visto bueno de Eslovaquia pondrá fin a la incertidumbre sobre las operaciones de rescate. Tras la reforma del fondo, deberá ratificarse durante el invierno en toda la zona euro la segunda intervención en Grecia y, el año que viene, la creación de un fondo permanente para el futuro (el Mecanismo Europeo de Estabilidad o MEDE). Un proceso que podría descarrilar en Finlandia, Holanda, Alemania.....
Baja el paro al 6,6%
El índice de desempleo en Alemania se situó en septiembre en el 6,6% frente al 7,2 % registrado hace un año, informó ayer la Agencia Federal de Empleo. En términos absolutos, se registraron 2,8 millones de personas sin empleo, 231.000 menos que hace un año.
Berlín aportará 212.000 millones en garantías
La reforma del fondo de rescate de la zona euro en proceso de ratificación elevará desde 440.000 millones de euros a 780.000 millones los avales aportados por los 17 socios de la Unión Monetaria. Con esa cifra, la FEEF (Facilidad Europea de Estabilidad Financiera) podrá captar en el mercado, sin perder su calificación de triple A, hasta 440.000 millones de euros para socorrer a los socios en dificultades. Alemania, que ratificó ayer su participación, pasa de aportar 119.000 millones en avales a 211.000 millones. España, que ya ha ratificado, de 52.000 millones a 92.000.La reforma también aumentará la capacidad de actuación de la FEEF, que podrá comprar deuda soberana, ofrecer líneas de crédito y contribuir a la recapitalización del sector bancario.Se está estudiando, además, autorizar su apalancamiento para dotar al fondo de más capacidad potencial.