Wall Street salva los muebles a última hora
Después de una explosiva apertura al alza y un bache intermedio, la Bolsa de Nueva York acaba la jornada con subidas moderadas. æscaron;nicamente el tecnológico Nasdaq persiste en terreno negativo.
Pintaba a celebración, pero la cosa se torció en el parqué neoyorquino, donde pasado el ecuador de la sesión el selectivo que aglutina a las empresas tecnológicas, el Nasdaq, arrastraba a Dow Jones y S&P 500 pendiente abajo. Una reacción postrera permite, no obstante, que estos dos índices se salven de la quema en el último momento.
Al cierre de la sesión, el Dow gana un 1,30% (11.153 puntos) y el S&P sube un 0,81% (1.160 enteros). Por su parte, en el Nasdaq se mantienen los descensos. El recorte es del 0,43% (2.480 puntos).
Con todo, queda diluido el efecto trampolín de las referencias macro, que habían elevado los ánimos de Wall Street en los primeros compases de la negociación. Tanto las peticiones iniciales de desempleo y como el PIB del segundo trimestre daban aliento al mercado.
El Departamento de Empleo estadounidense ha registrado 391.000 solicitudes de subsidio durante semana concluida el 24 de septiembre, lo que representa una caída de 37.000 peticiones respecto al periodo anterior. Este resultado es el mejor desde abril y por ello los operadores bursátiles acogían el dato con tremenda satisfacción. Máxime cuando los pronósticos preveían que el total alcanzara las 420.000 peticiones en la semana.
Asimismo, la economía de Estados Unidos ha crecido por encima de las expectativas durante el segundo trimestre del año. El PIB aumentó en ese lapso un 1,3%, una décima sobre las estimaciones de los expertos.
La favorable agenda doméstica aderezada con el sí alemán a la ampliación del fondo de rescate para la zona euro -que despeja algunas dudas sobre la estabilidad en el Viejo Continente-, provocaban una fulgurante salida de los selectivos norteamericanos, que a la postre se ha visto disminuida.
Empresas: vencedores y vencidos
Varias compañías atrajeron el foco de atención, pero entre ellas destacan las tecnológicas. Amazon pierde un 3,16%, un día después del debut de su nuevo tablet Kindle Fire.
También en relación con estos dispositivos, llegó hasta el parqué un runrún que atañe a RIM (Research In Motion) y que especula con la posibilidad de que la empresa haya paralizado la producción de su tableta PlayBook. Las acciones de RIM que cotizan en Nueva York caen un 3,4%.
Por otra parte, el videoclub en casa Netflix encaja un desplome del 11%, en lo que para algunos analistas continúa siendo un castigo a la división en dos unidades de negocio presentada hace un par de semanas.
Los títulos de Nokia, por el contrario, ganan casi un 4%, después de que el fabricante de móviles haya anunciado el cierre de una planta de producción en Rumanía y el despido de 3.500 empleados, para recortar costes.