Otra Alemania es posible

La coalición de Angela Merkel (entre conservadores y liberales) se ha convertido en el blanco de todas las críticas por su gestión de la crisis del euro. Y la exasperación por la actitud de Berlín ha resucitado más de una vez tópicos sobre el supuesto carácter avasallador de los alemanes o su falta de solidaridad. Cada día que pasa, sin embargo, surgen voces de la propia Alemania que apuestan por gestionar la crisis de otro modo. Y los votantes, mal que le pese al Bild, no salen espantados.

Todo lo contrario. Por quinta vez en lo que va de año, las elecciones celebradas el domingo en Berlín dejaron fuera de un parlamento regional a los liberales (FDP), máximos abanderados de la terapia de choque para Grecia en forma de expulsión del euro o suspensión de pagos inmediata. Aunque el descalabro de los liberales no se puede atribuir solo a su posición sobre Grecia, lo cierto es que sus líderes habían intentado ganar votos en las últimas semanas abogando por cortar la concesión de préstamos a Atenas.

Socialistas y Verdes han aprovechado los problemas del hermano menor de la coalición gubernamental para prometer a Merkel su apoyo si decide gobernar en minoría y deshacerse del incómodo aliado. El cambio aumentaría sensiblemente la capacidad de maniobra de la canciller en la crisis del euro, porque el SPD y Grünne mantienen una posición mucho más abierta sobre Grecia.

"Hemos perdido mucho tiempo, sobre todo, porque la canciller ha estado haciendo piruetas a partir de frases como: los griegos no recibirán ni un céntimo", se queja el antiguo ministro Finanzas, el socialista Peer Steinbrück, en una reciente entrevista que no tiene desperdicio. "Alguien tiene que explicar a la gente que la UE es la respuesta a 1945 y al siglo XXI (...) y que Alemania se beneficia de la integración europea en términos políticos, económicos y sociales", reclama un Steinbrück que podría ser el rival de Merkel en las elecciones de 2013. "Y, por supuesto, eso significa que los alemanes tendrán que pagar. Pero es un dinero bien invertido en nuestro futuro y en el de Europa, en paz y en prosperidad". Palabras de un alemán que deberían servir de vacuna contra más de un tópico.

Foto: Puente sobre el río Spree (Oberbaumbrücke) en Berlín (B. dM., 18-9-2011).