Cómo subir un 1,500% en un día (gracias a Suiza)
La devaluación del 10% puesta en marcha por Suiza para ha agitado el mercado de divisas con movimientos inverosímiles, y probablemente haya pillado los dedos de algunos especuladores con el pie cambiado. Largo de franco suizo, de oro y de bono alemán y corto de Bolsa y deuda del Sur de Europa. En los últimos meses la operativa ha funcionado de maravilla con ganancias en los dos lados de la ecuación.
Es lo que pasa con la operativa direccional, que tiene sus riesgos. Y apostar a la contra del mercado, sus momentos de gloria. Como explican en Infectious Greed, una opción put sobre el franco suizo contra el euro con vencimiento la semana que viene ha registrado un movimiento intradiario del 1.500%.
En todo caso, el impacto de la medida es profundo. Suiza pondrá en marcha la imprenta para comprar cuantos euros sean necesarios y no mover la cotización de 1,2 francos por euro. No hay que confundir esta medida con, por ejemplo, la defensa de la libra llevada a cabo por el Banco de Inglaterra en 1992, cuando claudicó ante Soros. Suiza no defiende, sino que ataca a su propia moneda.
En un mundo en el que la necesidad de refugio hace que algunos inversores hayan pagado por invertir su dinero en letras del Tesoro de Estados Unidos, la decisión tomada en Zurich restringe aún más el abanico de refugios e introduce un nuevo elemento en la crisis europea.
Estados Unidos, Reino Unido y Japón tienen políticas monetarias expansionistas y tipos al 0% para evitar los riesgos de recesión y para que la divisa barata favorezca las exportaciones. Si los países cuyas divisas hasta ahora se beneficiaban de la situación dicen basta, (Singapur y Noruega y Japón observarán con detenimiento si Suiza tiene éxito), y los tipos siguen en mínimos en casi todas partes, el atractivo de los actuales activos refugio (bonos alemanes, estadounidenses, oro …) será aún más brillante.
Así, el inversor citado arriba que vendía Bolsa y compraba francos ahora tendrá que vender Bolsa y comprar oro, o bonos alemanes. O algún activo en Suiza que considere a refugio de la tormenta (ojo a los precios del suelo en las montañas alpinas). Y si vende Bolsa española y compra activos denominados en francos, el Banco Central de Suiza venderá los francos a 1,20 para comprar euros. E invertirá los activos en deuda segura, alemana y francesa seguramente, lo que supondrá que el dinero seguirá fluyendo de Sur a Norte, pero pasando por Zúrich.
En otras palabras, para España, nada nuevo bajo el sol. Solo si alguien convenciese al Banco Central de Suiza de que, cuando invierta en euros, comprase deuda española e italiana, la decisión de Zurich tendría trascendencia. Y sería más eficaz, pues si algo ha disparado el franco suizo ha sido la incertidumbre sobre Europa. Pero, toda vez que el BCE hace su trabajo a regañadientes, no está claro si se lo hará el SNB.