Cómo afectan a las empresas los cambios del Impuesto de Sociedades
Una de las medidas anunciadas hoy ha sido la reforma parcial del Impuesto sobre Sociedades que afectará a las empresas de mayor dimensión. Se elevará el porcentaje de los pagos fraccionados para las compañías que facturen más de 20 millones de euros a entre el 24% y el 27%, ahora se sitúa en torno a un 21%. También se limitará la capacidad de compensar pérdidas de ejercicios anteriores. Las medidas, que afectarán a unas 3.900 compañías, se extenderán hasta 2013.
La vicepresidenta económica, Elena Salgado, ha explicado en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros celebrado hoy que no es un cambio en profundidad del Impuesto de Sociedades y que no supone ningún incremento del tributo ni de sus deducciones.
El Impuesto de Sociedades continúa por tanto en el 30%. "Supone únicamente el anticipo de los pagos a cuenta de las empresas de mayor dimensión", ha explicado. El Gobierno ha hecho dos grupos de compañías: las que facturan entre 20 y 59,9 millones de euros y las de al menos 60 millones.
Para las compañías que facturan entre 20 y 59,9 millones, se elevará el porcentaje de sus pagos fraccionados hasta el 24% desde el 21% actual. Para las que facturan al menos 60 millones se subirá hasta el 27%. Igualmente, algunos créditos fiscales no podrán aplicarse por completo.
Las empresas del primer grupo, de hasta 59,9 millones de euros de facturación, se podrán compensar un 75% de las bases imponibles negativas -es decir, de los créditos fiscales por pérdidas registradas en ejercicios anteriores-, en lugar del 100% actual. Las del segundo grupo, las más grandes, solo se podrán aplicar la mitad.
Elena Salgado ha explicado que, para que no haya ningún problema a la hora de aplicarse los créditos fiscales por compensación de bases imponibles negativas, se ampliará el límite de años para aplicarse estos créditos de 15 a 18 años. De esta ampliación se beneficiarán todas las empresas, no solo las de mayor tamaño. Todas las medidas se extenderán hasta 2013.
El Gobierno ha limitado también la deducción del fondo de comercio financiero. Dicho fondo se deducirá en ambos ejercicios por centésimas partes y no por veinteavas partes como en el resto de los ejercicios. Así, de un fondo de comercio de 100 millones, las grandes empresas podían deducirse 5 millones y ahora podrán deducirse solo un millón. Esta medida se mantendrá, igualmente, hasta 2013. El Ejecutivo asegura que "se trata también de una periodificación de impuestos, ya que los importes no deducidos en dichos ejercicios serán deducibles en los ejercicios posteriores".
¿Cómo funciona actualmente el Impuesto de Sociedades?
1. Tres pagos fraccionados:
Actualmente, las empresas tienen la obligación de realizar tres pagos fraccionados del Impuesto de Sociedades durante el ejercicio fiscal y lo hacen en los meses de abril, octubre y diciembre de cada año. Se trata de pagos a cuenta, que se compensan una vez que se liquida el impuesto (esto se hace entre el 1 y el 25 de julio de cada año para las empresas cuyo ejercicio fiscal es el año natural).
2. Dos formas de pago:
Las empresas tienen dos formas de realizar estos pagos fraccionados: aplicando un porcentaje del 18% sobre la cuota íntegra del último Impuesto de Sociedades declarado o en base a los resultados que están teniendo durante el ejercicio. En este último caso, el porcentaje a pagar es de cinco octavos del tipo impositivo correspondiente, por lo que con un tipo de tributación del 30%, el porcentaje a aplicar sería del 21%. Las pequeñas empresas pueden optar por cualquiera de los dos métodos, pero las grandes empresas sólo pueden recurrir a la segunda opción.
3. Gestión:
El Gobierno asegura que quiere mejorar la gestión de este tributo, haciendo su recaudación más rápida y eficiente. Y lo ha hecho elevando, para las grandes empresas, el porcentaje de sus pagos fraccionados, hasta el 24% o el 27% frente al actual, del 21%. Así, Hacienda obtendría más dinero por anticipado de las empresas de mayor dimensión.
4. Adelanto de los pagos a cuenta:
La medida no supone para las empresas una subida de su tributación (al final pagarán lo mismo), pero tendrán que adelantar al Estado más dinero del que actualmente le pagan a cuenta por este impuesto. Las limitaciones a la hora de aplicarse los créditos fiscales derivados de pérdidas registradas en pasados ejercicios también contribuirán a elevar el dinero que recibe el Estado.