Fitch confirma la triple A a EE UU
Primero Moody's le degradó la perspectiva y luego Standard & Poor's le bajó la nota un escalón. Sólo faltaba Fitch por pronunciarse. La más pequeña de las triada de agencias de calificación ha sido la más benévola. Ha mantenido sin cambios la matrícula de honor sobre la deuda de EE UU. No obstante, advierte que revisará la calificación a finales de año.
La agencia de calificación crediticia Fitch Ratings ha confirmado hoy la máxima nota de solvencia ''AAA'' de EEUU con perspectiva ''estable''. Considera que "los pilares fundamentales de la excepcional solvencia de EEUU continúan intactos". Aunque el voto de confianza tiene sus grietas. Fitch advierte que volverá a la carga en diciembre y que podría tomar alguna acción "negativa". Todo dependerá de la evolución de las perspectivas económicas estadounidenses, que ha sufrido una considerable desaceleración en el segundo trimestre el año. El otro factor de riesgo será eminentemente político: la capacidad de los legisladores para alcanzar un acuerdo que recorte el déficit (un 9% del PIB) en al menos 1,2 billones de dólares (833.330 millones de euros).
La traducción del eufemismo "acción negativa" sería una revisión a la baja de la perspectiva crediticia de la nación de las barras y las estrellas. Lo que a su vez se correspondería con una posibilidad superior al 50% de una rebaja de la nota en un horizonte de dos años.
Moody's fue quién abrió la veda a principios de agosto. Precisamente al poner revisión la calificación de la deuda soberana por temor a que el Congreso no fuera capaz de lograr un acuerdo sobre el ajuste del déficit y el techo de deuda. El acuerdo llegó, pero no fue suficiente para detener la inercia de las agencias de calificación. El séis de agosto Santandard & Poor's asestaba un duro golpe a la, por ahora, primera potencia mundial. La agencia rebajó por primera vez en la historia la nota de la deuda estadounidense, de AAA a AA+.. La noticia provocó una tormenta en los mercados, dando incio a una auténtica semana de pánico a ambos lados del Atlántico. Volatilidad extrema, primas de riesgo disparadas, Bolsas vapuleadas, activos refugio en niveles récord y mucho nerviosismo.
Fitch confía en la credibilidad norteamericana en el entorno las finanzas internacionales, así como en la flexibilidad, diversidad y riqueza de su economía. Pero avisa: "una revisión al alza de las proyecciones de deuda pública a medio y largo plazo de Fitch ya sea por un debilitamiento mayor de lo esperado recuperación de la recuperación económica o del fracaso del comité en lograr un acuerdo sobre las medidas para reducir el déficit podría dar como resultado una acción negativa sobre la calificación", advierte la agencia.