Los futbolistas de primera y segunda van a la huelga
El sindicato de futbolistas anunció ayer que convocará una huelga en primera y segunda división durante los dos últimos fines de semana de agosto. El motivo es la falta de acuerdo en la negociación del convenio colectivo con la Liga de Fútbol Profesional.
Los futbolistas de primera y segunda división no jugarán las dos primeras jornadas si no se llega a un acuerdo con la Liga de Fútbol Profesional (LFP) en la negociación del convenio colectivo. "La liga no dará comienzo hasta que no se firme", anunció ayer el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), Luis Rubiales, en una rueda de prensa.
Las reivindicaciones se refieren a un fondo de garantía concursal que aseguraría 240.000 euros del salario de cada jugador de primera y 120.000 euros de cada uno de segunda de aquellos clubes que hubiesen declarado el concurso de acreedores.
Rubiales denunció que se trata de un acuerdo "unilateral" que ha creado un instrumento insuficiente "para cubrir las deudas de este año y las que se generen después".
Se ha llegado "al tope" que puede alcanzar la LFP, aseguró ayer su presidente, José Luis Astiazarán, quien, además de pronosticar "una solución muy difícil" del conflicto, considera "incomprensible" la convocatoria de una huelga ahora.
"No entendemos por qué la AFE convoca una huelga, no creo que tenga motivos en este momento", explicó Astiazarán, quien quiso recordar que además del fondo de garantía la LFP ha aprobado la autorregulación financiera de la liga, "lo que supondría un importante paso a la hora de asegurar el cumplimiento de los compromisos económicos de los equipos" con sus jugadores.
El presidente de la AFE, sin embargo, explicó rodeado por más de 100 futbolistas, entre los que se encontraban Iker Casillas, Carles Puyol o Juan Mata, que la asociación propone medidas preventivas: por un lado, que a los jugadores a quienes se les adeuden tres mensualidades puedan romper su contrato, o, por el otro, que el club que no haga frente a sus deudas no pueda competir, como ocurre en Alemania, Inglaterra u Holanda.
"Los futbolistas no quieren más dinero; quieren que se cumplan los contratos", explicó Rubiales. La convocatoria de huelga, una decisión "firme, unánime y responsable" del sindicato de los futbolistas, preocupa a una patronal que asegura llevar más de dos meses trabajando en el convenio.
Precedentes. Llamadas a la huelga
1997-1998: un acuerdo permitió desconvocar la huelga como protesta por la llegada masiva de extranjeros a la liga.2007-2008: a la firma del convenio le precedió un paro desconvocado un mes antes del inicio de la competición.2009-2010: se paralizó la huelga con la que el sindicato pretendía conseguir un gran pacto por el fútbol que acabase con los problemas económicos.