Hoteles para que las plantas no se descuiden en las vacaciones

Aparecen los primeros centros dedicados al cuidado de las plantas en verano

Cuando llega el verano, los animales y las plantas se convierten en un quebradero de cabeza para sus dueños. Desde hace varios años las residencias de mascotas son un buen recurso para todos aquellos que no pueden llevar consigo a sus perros, gatos, pájaros, reptiles… Sin embargo, el asunto de las plantas no tenía hasta ahora esa solución. Confiárselas a familiares, amigos o vecinos era hasta el momento la opción más socorrida, pero han empezado a surgir espacios que sirven de refugio a las especies herbáceas.

El centro comercial Islazul de Madrid ha puesto en marcha este año, por primera vez, una nueva iniciativa denominada Hotel para Plantas con la que pretenden "ofrecer al cliente un servicio que traspase las fronteras del consumo", según indican fuentes del centro. Esta actividad se enmarca en el proceso de acción social que busca que el cliente obtenga un servicio complementario.

A diferencia de lo que podría llegar a pensarse, esta asistencia, disponible desde el 1 de julio hasta el 31 de agosto, es gratuita. Lo único que tiene que hacer todo el que esté interesado es rellenar una ficha y aceptar las condiciones del contrato entre las que se incluye el fumigado o la poda, además de un eximente de responsabilidad para el centro en caso de daños.

El servicio que ofrece Islazul es gratuito y busca ampliar la oferta de actividades sociales

Pese a que no se ha desarrollado ninguna campaña de publicidad, a excepción de los carteles informativos de la superficie comercial, desde el centro aseguran que la aceptación por parte de la clientela ha sido muy positiva. En la actualidad cuentan con 95 plantas, en su mayoría orquídeas y de la ahora famosa planta del dinero.

El jardinero encargado del mantenimiento, Roberto Sánchez, se ocupa del riego y atiende las necesidades de cada especie, prestando especial atención a las que padecen alguna plaga o que llegan en mal estado, algo que suele ser habitual. Su trabajo se desarrolla en un espacio acondicionado por el centro en colaboración con Islaverde, la empresa que se ocupa del cuidado de los lugares ajardinados.

La concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Pozuelo dispone de un servicio especial de guardería dentro de su hospital para plantas. El funcionamiento es similar al anterior, se dedican al cuidado de las especies a partir de un análisis previo que permitirá establecer su ubicación. El servicio, que también es gratuito, se viene desarrollando desde hace cinco años y cuenta con la supervisión de un técnico fitopatólogo y la colaboración de varios voluntarios.

Las soluciones para resistir sin sacar las macetas de casa

Quienes no quieran mover de casa sus plantas, ni cuenten con un familiar y amigo dispuesto a regarlas alguna que otra vez, disponen de distintas soluciones para evitarse sustos cuando vuelvan a casa tras las vacaciones. Lo primero es acondicionar un espacio adecuado para ellas: preferiblemente en el que estén juntas, con cierta frescura, algo de luz pero no sol directo. Lo ideal es que las macetas estén envueltas en un plástico transparente y agujereado, y la tierra cubierta con algún acolchado -como cortezas de árbol- que eviten la evaporación del agua que dejemos en el último riego.En caso de que la ausencia sea de menos de una semana, algunos trucos caseros pueden ser suficientes. El más conocido es el de las botellas de plástico, invertidas, que vayan goteando poco a poco. Un principio similar es por el que funciona el barreño colocado entre las macetas, y tapado para evitar la evaporación, del que se sacaría una cuerda de algodón -o una media o calcetín- a cada planta, para ir distribuyendo un goteo. Con un humidificador funcionando suavemente si la sala no es muy grande bastaría para salir adelante un periodo corto.En caso de ausencias más prolongadas, el riego automático es una alternativa segura. Existen en el mercado recipientes que dosifican funcionando con pilas, sin necesidad de enchufe. Finalmente, los distintos geles que se disuelven paulatinamente en agua y minerales garantizan hasta 30 días de mantenimiento.