Los presidentes de las cajas vascas se reúnen para apuntalar su fusión
Los presidentes de las cajas vascas se reunieron ayer para encajar los últimos flecos de la fusión fría y poder contar el próximo jueves con el apoyo de los respectivos consejos de administración. Las claves a despejar fueron el reparto del capital del nuevo banco, el apoyo de Bildu en Kutxa y el del PP en Vital.
Mario Fernández (presidente de BBK) se reunió ayer con sus homólogos de Kutxa (Xabier Iturbe) y Vital (Carlos Zapatero) para despejar el camino a la fusión -el cuarto intento en seis años-. En el encuentro se analizaron los tres temas que ensombrecen el proyecto. Desde la confección del mapa accionarial del nuevo banco, hasta la irrupción de Bildu como primera fuerza política en Guipúzcoa tras las elecciones del 22-M, pasando por la oposición matizada del PP alavés. Sin olvidar que los retrasos juegan en contra de la operación.
El acuerdo sobre el reparto del capital parte del estudio realizado sobre la magnitud de cada entidad por el consultor Analistas Financieros Internacionales (AFI). De acuerdo con la hoja de ruta marcada por AFI, BBK podría optar a más de un 60%, el techo de Kutxa no llegaría al 30% y Vital obtendría un 9%. Sobre estos ratios se han aplicado numerosas combinaciones para formar una entidad que nacería con unos activos de más de 78.000 millones, con una red de 1.300 oficinas y una plantilla integrada por 8.300 profesionales.
De dos dígitos
Fuentes del sector han señalado que BBK optará por una postura "favorable" a la fusión, en el sentido de que la culminación del proyecto pasará por no hacer valer todo su músculo económico en el nuevo banco (la entidad vizcaína concentra más del 62,2% de los activos totales). Las mismas fuentes apuestan por una "solución de dos dígitos" que convenza a todos. Es decir, BBK con el 60%, Kutxa con el 30% y Vital con el 10%. El PP alavés puso el grito en el cielo la semana pasada asegurando que no apoyaría la fusión con un 9% para la Vital, "una parte ínfima de un banco propiedad de BBK".
Otro frente abierto tras el 22-M es Bildu, ahora la primera fuerza política en el territorio de Kutxa. El PNV buscará su apoyo al nuevo banco después de propiciar el nombramiento de Martín Garitano como diputado general de Guipúzcoa, que ha reconocido "una relación preferencial" para "buscar acuerdos puntuales" con la formación de Íñigo Urkullu. Si los acuerdos de ayer son respaldados el jueves por los consejos de las tres cajas, las asambleas extraordinarias pudieran ser convocadas en la primera quincena del próximo septiembre. Los consejos trabajan con los datos de las cajas al cierre de 2010. Un retraso obligaría a un nuevo análisis, en base a los balances del primer semestre de 2011.
El 22-M irrumpe en el grupo de Cajastur
Las elecciones del 22-M han irrumpido en la fusión de Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria. El triunfo de Francisco Álvarez Cascos en Asturias y del PP en Extremadura, ambos contrarios al proyecto, distorsionan una operación que está muy avanzada. Las tres entidades celebrarán mañana y pasado sus respectivas asambleas para la segregación de sus activos y su traspaso al nuevo banco. Cascos y José Antonio Monago, el próximo presidente de Extremadura, no han formado sus Gobiernos y no tendrán representación en las asambleas. Los promotores de la fusión confían en obtener un amplio respaldo. Las asambleas de mayo aprobaron por más del 80% la creación del nuevo banco y un contrato de obligaciones que impone penalizaciones económicas si alguna caja renuncia.