"La CE tiene la llave para que Europa cuente con su tarjeta"
Doctor en Economía por la Universidad de Burdeos y ex director general de Crédit Agricole y LCL, lleva las riendas del sistema de pagos electrónico europeo que impulsan 24 grandes bancos de la región.
Europa quiere contar con su propia plataforma de pagos electrónicos. Una alternativa a enseñas como Visa o Mastercard. Una veintena de grandes grupos bancarios analizan la viabilidad de la futura marca Monnet. El proyecto se ha puesto en manos de un peso pesado del mundo financiero: el ex director general de Crédit Agricole, George Pauget.
¿Qué es Monnet?
Monnet es una plataforma abierta de pago. Como tarjeta tendrá un uso y nivel de servicio idéntico en toda Europa. Pero además de ser admitida en comercios tradicionales, servirá para operaciones en internet, pagos por móvil, transacciones sin contacto, consulta de saldos y gestión de cuentas de ahorro.
¿Quién impulsa esta iniciativa?
En el proyecto participan 24 grandes bancos de Europa que cuentan con una cuota de mercado superior al 25% en siete países. Es un algo único en la historia de los medios de pago. De España están Santander, BBVA, La Caixa, Caja Madrid, Banco Popular, Banco Sabadell y Banco Cooperativo (Grupo Caja Rural).
¿Buscan los promotores de Monnet competir con Visa y Mastercard?
Podemos estar en competencia con ellas, pero también podemos trabajar juntos. De hecho, estamos en negociaciones con Mastercard para colaborar de forma inteligente tanto de cara a los clientes y como bajo un punto de vista económico. No se trata de rivalizar con Visa o Mastercard, nuestro proyecto tiene un abanico de actividad más amplio.
¿Por qué le interesa a Europa tener un esquema de pagos propio?
En primer término, un nuevo esquema de pagos evita la existencia del duopolio que existe hoy. Además, Monnet da un contenido operacional a la zona única de pagos del euro (SEPA) que promueve una unificación de las reglas y protocolos técnicos en las transacciones electrónicas en toda Europa. Actualmente, el proceso varía de un país a otro.
¿Y qué ventajas genera para usuarios y comerciantes?
Los medios de pagos son una industria donde las economías de escala juegan un papel muy importante. Ahora estas están limitadas por los mercados nacionales. Monnet reduciría el precio de las transacciones porque en la región se realizan billones de operaciones.
En EE UU existen varios esquemas de pago, como Visa, Mastercard, Amex o Diners... ¿Hay otras regiones con proyectos similares a Monnet?
En Japón existe JCB y en China se está desarrollando China Union Pay. Están surgiendo varios sistemas con carácter internacional. Además, en los próximos años veremos nuevos competidores en el sector como grandes cadenas de distribución o firmas tecnológicas como Google, Facebook o Microsoft. Para los bancos es importante tener en cuenta la competencia cambiará.
¿Es necesario un sistema europeo de pago por razones políticas?
Puede ser útil tener una compañía controlada por bancos europeos. Hay que considerar que los medios de pago son internacionales y que existe una competencia abierta. Aun así, crear un esquema europeo no es una cuestión política ni de soberanía. Es un tema industrial, de precio y competencia.
En Monnet participan grandes bancos de España, Francia, Alemania e Italia. Pero apenas de Reino Unido.
Tenemos un socio británico, World-pay. Se ha considerado desarrollar los trabajos preliminares del proyecto Monnet solo con los 24 bancos fundadores por simplicidad. Una vez terminado el estudio de viabilidad, invitaremos a las entidades británicas a participar como socios de pleno derecho.
¿Qué actitud muestran el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE) hacia Monnet?
El BCE apoya Monnet pero la clave reside en a la CE, que está analizando las tasas multilaterales de intercambio que aplican Mastercard y Visa. Hemos propuesto soluciones para fijar estas tasas. La Dirección General de Competencia debe definir unas normas sobre las tasas de intercambio. La banca no puede decidir aún si saca adelante el proyecto porque existen incertidumbres sobre el modelo de negocio. Se tomará una decisión en septiembre u octubre.
¿Qué inversión requiere Monnet?
Cientos de millones de euros.
¿Cómo se estructurará Monnet desde un punto de vista societario? ¿Qué forma jurídica adoptará?
La norma europea exige separar entre el esquema y el proceso. Por eso, si finalmente sale adelante, se constituirán dos sociedades separadas. Una que gestionará la red de aceptación y otra hará el procesamiento de transacciones. Monnet será una organización sin ánimo de lucro gestionada por bancos.