Un paseo con Antonio López en el Thyssen
Años, incluso décadas, de las mejores obras del artista Antonio López aunadas en una retrospectiva que le brinda el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid, a partir del próximo 28 de junio y hasta el 25 de septiembre.
Un paseo por una cuidada selección de 130 piezas, entre pinturas, dibujos y esculturas, acercan al visitante al pasado del conocido pintor de Tomelloso (Ciudad Real), que a sus 75 años se ha marcado como meta de futuro dar un nuevo rumbo a su trabajo y centrarse más en las personas.
Pero esta exposición relata el paso del tiempo a pinceladas. Lo cotidiano, los amores de toda una vida, las composiciones frutales, las vistas urbanas, especialmente de Madrid, y los retratos de su familia plasman con detenimiento la esencia del objeto o del paisaje en cuestión. Destaca entre la obra escultural el homenaje realizado a la cultura griega, con copias exactas de piezas rescatadas del Templo de Olimpia.
Sin orden cronológico, la muestra está dividida en dos espacios dando prioridad a la estética. La inacabadas "siete vistas de la Gran Vía" serán como si el visitante "se trasladara a un estudio en pleno funcionamiento", afirma López.
"Una obra nunca se acaba, sino que se llega al límite de las propias posibilidades". Con estas palabras, el que fuera Premio Velázquez 2006 describe su forma de entender el arte, de dejar parte de la esencia de su ser en cada pintura o dibujo.
Ya desde niño demostró su habilidad para el dibujo y de ello se percató su tío Antonio López Torres, también pintor de paisajes que le introdujo en el oficio. A su paso por Madrid recibió varios premios y dio el salto a Italia para estudiar la pintura del Renacimiento. Con alguna influencia del quattrocento italiano, del cubismo e incluso del surrealismo, siempre ha mantenido su inclinación por el realismo, recreándose hasta el extremo en los detalles.
El horario de visitas será de martes a domingo de 10.00 a 19.00 horas. Lunes cerrado. La taquilla cierra a las 18.30 horas.