¿Qué se puede esperar de la construcción?
La crisis inmobiliaria ha paralizado la actividad constructora residencial y llevado a la quiebra a muchas empresas del sector. La destrucción de empleos en el sector constructor, principal motor de la economía durante los años de bonanza, ha sido dramático y todavía no ha tocado fondo. La recaída de los últimos indicadores inmobiliarios son un síntoma claro de que el ajuste del mercado inmobiliario no ha finalizado y continuará el goteo de despidos.
Alrededor de 1,18 millones de empleados en la construcción han perdido su trabajo desde 2007. Es difícil que el paro en España mejore sustancialmente mientras no se reanime termine la construcción, en opinión de varios expertos, aunque en buena parte suponga volver al modelo de crecimiento que desencadenó la crisis.