Di a quién pagas, también en Europa
Ha tardado, pero la Comisión Europea ha anunciado hoy, por fin, que el próximo mes de octubre aprobará un proyecto de directiva que obligará a las industrias mineras, petroleras o gasísticas europeas con actividad extractiva en los países subdesarrollados a detallar la contabilidad de esas operaciones, para poder comprobar quién se beneficia realmente en esos países de unas inversiones multimillonarias.
La propuesta de Bruselas llega tras una intensa campaña de las organizaciones no gubernamentales a favor de esa medida de transparencia financiera. Y un año después de que EE UU ya impusiese esa transparencia dentro de la reforma del sector financiero conocida como ley Dodd-Frank. La ley estadounidense obliga a las compañías cotizadas bajo control de la SEC a detallar cada año los pagos realizados en cada país y los proyectos llevados a cabo.
En esos países, riquísimos en recursos naturales, 1.500 millones de personas viven con menos de dos dólares per cápita al día, según la ong Oxfam. Entre las causas de esa pobreza extrema y endémica se cita la corrupción y la evasión fiscal ligada a la explotación de sus recursos, unas lacras que algunas multinacionales toleran cuando no fomentan abiertamente.
Las ong recuerdan que la aplicación de las normas de transparencia a petroleras y mineras ha contado en EE UU con el apoyo de los fondos de inversión, que pueden condicionar la colocación de sus ingentes reservas al cumplimiento de una actitud social responsable en los países más pobres. Si el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, cumple su promesa, parece que la misma disciplina financiera se aplicará pronto a la industria europea.