Sony rebaja su previsión de resultados
El fabricante japonés de productos electrónicos Sony ha rebajado su previsión de resultados para el ejercicio 2010-2011, que concluyó el pasado 31 de marzo, como consecuencia de asumir una carga de 360.000 millones de yenes (3.153 millones de euros) relacionada con impuestos diferidos.
Sony ha rebajado su previsión de resultados para el ejercicio 2010/2011, que concluyó el pasado 31 de marzo, como consecuencia de asumir una carga de 360.000 millones de yenes (3.153 millones de euros) relacionada con impuestos diferidos, lo que ha provocado un resultado negativo de 260.000 millones de yenes (2.278 millones de euros) al cierre de su ejercicio fiscal, en contraste con la anterior expectativa de un beneficio neto de 70.000 millones de yenes (613 millones de euros).
No obstante, el fabricante de los televisores Bravia y de los ordenadores Vaio precisó que su facturación y su resultado operativo para el conjunto del ejercicio se situarán en línea con lo previsto el pasado 3 de febrero, a pesar del impacto del terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo.
"Sony asumirá una carga no en metálico de unos 360.000 millones de yenes en el cuarto trimestre de su año fiscal que concluyó el 31 de marzo de 2011 para establecer una provisión de reserva frente a activos fiscales diferidos en Japón, lo que resultará en pérdidas atribuídas para los accionistas de Sony e implica un descenso sustancial respecto a las previsiones de febrero", explicó la multinacional, que publicará sus cuentas del pasado ejercicio el próximo 26 de mayo.
De este modo, Sony estima que su cifra de negocio se situó en 7,18 billones de yenes (62.950 millones de euros), un 0,3% por debajo de las previsiones de febrero, a pesar del impacto de unos 22.000 millones de yenes (193 millones de euros) de la catástrofe del pasado 11 de marzo. Por su parte, la compañía ratificó un beneficio operativo de 200.000 millones de yenes (1.754 millones de euros).
De cara al presente ejercicio, la multinacional japonesa espera un aumento de sus ventas, así como un resultado operativo en línea con el del anterior año fiscal y cerrar el ejercicio en positivo a pesar del impacto del terremoto y el tsunami.