_
_
_
_
Renegocian contratos y aplazan ciertos servicios

Los municipios alertan de la falta de fondos para atender al turista

Los ayuntamientos renegocian contrarreloj contratos y reducen servicios para poder cubrir el repunte del turismo en temporada alta. El alcalde de Sitges y vocal de la Federación de Municipios de Cataluña, Jordi Baiget, reclama más financiación y considera la situación insostenible.

La crisis en Túnez y Egipto y la recuperación de los grandes mercados emisores de turistas a España (Francia, Alemania o países nórdicos) ha propiciado un repunte de la actividad. Entre enero y marzo han llegado 250.000 visitantes más que en el mismo periodo de 2010 y las primeras previsiones prevén que se pueda cerrar el año con una ganancia de cuatro millones.

Un bálsamo para las deprimidas cuentas de los ayuntamientos en la medida en la que supondrá más ingresos, actividad y empleo, pero un problema añadido, ya que van a tener que elevar el gasto en un contexto en el que la mayoría tiene prohibido el acceso al endeudamiento a largo plazo y ha sufrido un recorte de sus ingresos como consecuencia de la crisis.

¿Cómo van a afrontar esta situación? Los alcaldes consultados apuntan a que se ha acelerado la renegociación de los contratos con todos los proveedores de servicios para ajustar los gastos, lo que en algunos casos supondrá dejar de prestar los servicios o diferir su pago en el tiempo. Un buen ejemplo se produce en Pájara (Fuerteventura), uno de los municipios con mayor número de pernoctaciones en España (30.000 diarias de media), en el que el presupuesto municipal ha bajado en 13,5 millones para este año. "No vamos a dejar de hacer ningún servicio, simplemente hemos tenido que priorizar las necesidades y elevar el control del gasto", recalca Ramón Carmelo Cabrera, concejal de Economía del municipio. En concreto señala que se han tocado algunos contratos como el de recogida de basuras, lo que permitirá que se realice diariamente en algunas zonas, mientras que en otras solo se hará en días alternos.

En otras localidades costeras, la situación es más dramática. En localidades tan visitadas como Salou o Cambrils, los sindicatos han advertido sobre el colapso de los ambulatorios por la llegada masiva de turistas, por lo que han solicitado que se reasignen plantillas de centros del interior hacia los de la costa. Las estrecheces presupuestarias han llevado, por ejemplo, a reducir en 20 personas la plantilla de policías turísticos en la isla de Mallorca para la temporada alta. El principal motivo es que hay ayuntamientos que no tienen dinero para subvencionar el 25% del salario que les corresponde abonar.

Jordi Baiget, alcalde de Sitges y vocal de la Federación de Municipios de Cataluña, exige coraje a los municipios para afrontar el repunte del turismo. "No podemos fallar a la hora de atender al turista, pese a que la situación es insostenible. Necesitamos más financiación", remarca. Entre los planes que han llevado a cabo, Baiget destaca el cambio de planificación en los contratos de limpieza. "Hemos tenido que replantear todos para que cuadraran las cuentas. Se han priorizado las zonas con mayor concentración de turistas, mientras que aquellas que no requieran una limpieza tan exhaustiva no recibirán servicio todos los días". Asimismo, señala que se ha recortado el gasto vinculado a la jardinería, "se va a hacer un mantenimiento mínimo para no deteriorar el paisaje" y el ligado a la promoción turística. "Toda la publicidad se hará a través de soportes móviles, lo que ha reducido sensiblemente el coste", recalca.

Baiget cree, no obstante, que la peor parte de la combinación de menos ingresos y más visitantes se la van a llevar los municipios turísticos que han basado su modelo de crecimiento en segundas residencias y en grandes plantas hoteleras. "Esos lo van a tener muy difícil para mantener sus infraestructuras", remarca.

Solo 21 ayuntamientos reciben un trato especial

La Ley de Municipios Turísticos se aprobó en 2002 y en los nueve años que han transcurrido desde su puesta en marcha no se ha introducido ninguna modificación en la misma, lo que ha provocado la protesta de un gran número de ayuntamientos que se han quedado fuera de las ayudas.El texto establecía que los municipios con una población censada superior a 20.000 habitantes, con más de un 50% de viviendas turísticas y que no fueran capitales de provincia podrían beneficiarse del 2,5% de la recaudación que se produjera en su territorio por la venta de hidrocarburos y tabaco.Las dificultades para cumplir las características han provocado que solo se beneficien de las mismas 21 ayuntamientos, que reciben una transferencia de 9,2 millones de euros al año. El municipio que más ingresa es Calvià (Mallorca), con cerca de 900.000 euros, seguido por Denia (Alicante), con 687.722 euros, y El Vendrell (Tarragona), con un total de 532.849 euros.La provincia de Alicante es la más beneficiada por esos criterios, con seis municipios (Calpe, El Campello, Denia, Jávea, Santa Pola y Pilar de la Horadada), pese a lo que la diputación ha pedido en reiteradas ocasiones que se modifiquen los criterios para que otras localidades, como Benidorm, sean calificadas como municipios turísticos. El consistorio de esa localidad calcula que su no inclusión en la lista le hace perder más de un millón de euros al año.En el último ejercicio, el Partido Popular ha presentado en varias ocasiones proposiciones para aplicar un IVA superreducido del 4% a las actividades turísticas, una propuesta que cuenta con el respaldo de la industria y CiU y el rechazo del Gobierno.

La asfixia en los entes locales

Endeudamiento. La deuda de los municipios se elevó a 35.442 millones de euros a finales de 2010. De ellos, 6.453 le corresponden al Ayuntamiento de Madrid. El fuerte crecimiento de la deuda llevó al Ejecutivo a prohibir por decreto ley el endeudamiento a largo plazo a todas las corporaciones. Forzado por la presión de algunos grandes consistorios, que amenazaron con presentar suspensiones de pagos ante la incapacidad para afrontar los pagos, permitió esquivar esta prohibición a aquellos cuya deuda no supere el 75% de los ingresos. Fuera de esa excepción, sin embargo, ha quedado de nuevo Madrid.Inversión. La inversión local ha sufrido un brusco frenazo en el primer trimestre como consecuencia del final del planes E, que insuflaron 13.000 millones de euros a las arcas locales en 2009 y 2010 para financiar obras y gasto social. Solo en el primero de ellos se generaron 426.000 puestos de trabajo.

Ingresos. El desplome de la construcción ha tenido mucho que ver con el deterioro de las finanzas locales. En 2008, último dato disponible, los ingresos vinculados a la actividad inmobiliaria supusieron el 6% de los ingresos financieros. En los municipios de más de un millón de habitantes, el porcentaje llega al 7%.

Devoluciones. A partir de enero de 2011, los ayuntamientos han tenido que empezar a devolver el dinero de más que les dio el Estado. En 2008 y 2009, el Estado transfirió unos fondos a los ayuntamientos en virtud de lo que estimaba que se recaudaría. Lo que se ingresó estuvo muy por debajo de lo previsto y los ayuntamientos disponen de cinco años (60 mensualidades) para devolver ese importe. Para compensar esa merma, los ayuntamientos han solicitado una mayor participación en el IVA generado en su territorio o la creación de una tasa que grave la población flotante de cada municipio.

Archivado En

_
_