Los sindicatos advierten que el giro de la CEOE amenaza la reforma de los convenios

"La situación emocional del Comité de CEOE no se corresponde con el estadio de la negociación en sí", sentenció ayer el secretario general de UGT, Cándido Méndez.

La petición cursada el martes por el órgano ejecutivo de la patronal al presidente, Juan Rosell, ha puesto en alerta a los sindicatos, concentrados esta semana en el congreso intersindical de Atenas.

Los empresarios quieren mano dura: exigen al patrono de patronos que no acepte cualquier acuerdo en la reforma de la negociación colectiva. Especialmente en los capítulos de medidas de flexibilidad interna y el recuso al arbitraje para desenquistar la renovación de los convenios expirados. Desde CC OO no ocultan su preocupación, dado que la llamada de atención de la ejecutiva de CEOE podría suponer el "retroceso en algunos temas cerrados" y "añadir complejidades adicionales a las negociaciones".

Con todo, el propio Méndez indicó desde Atenas que "la reunión definitiva de la patronal, la de la Junta Directiva, será el 28 de mayo". Sea como sea, los sindicatos reconocen que el nuevo escenario podría retrasar el acuerdo más allá del 31 de mayo, límite que las propias partes se habían puesto hace tan solo una semana.