Iberdrola ya tiene más clientes en Brasil que en España tras comprar Elektro
Iberdrola ya tiene 1,2 millones de clientes más en Brasil que en España en su negocio principal, la distribución eléctrica. La compra de Elektro, cerrada ayer, sitúa a la compañía como una de las mayores eléctricas del gigante latinoamericano.
Iberdrola cerró ayer la compra de la distribuidora eléctrica brasileña Elektro a Ashmore Energy International, la antigua división internacional de Enron. Una operación valorada en 2.400 millones de dólares (1.620 millones de euros) que va a suponer un salto cualitativo para la compañía española. Y es que, tras la operación, la compañía ya tiene más clientes en Brasil que en España en su negocio principal, el de la distribución eléctrica.
Hasta ahora, el grupo contaba con 9,13 millones de clientes brasileños, a los que suministra electricidad en los estados de Bahía, Río Grande do Norte y Pernambuco a través de tres distribuidoras: Coelba (4,9 millones de puntos de suministro), Cosern (1,13 millones) y Celpe (3,1 millones).
Estas tres sociedades forman parte de Neoenergia, el holding que canaliza las actividades de Iberdrola en Brasil y cuyo capital comparte la empresa española (que controla un 39% de las acciones) con Banco Do Brasil (12%) y con el fondo de pensiones Previ (49%).
Con Elektro, la octava distribuidora brasileña y una de la principales del estado de Río de Janeiro, Iberdrola suma 2,2 millones de clientes más.
De esta forma, la compañía atenderá a 11,3 millones de clientes de electricidad en Brasil frente a los 10,1 millones que tiene en España. Incluso sumando los puntos de suministro de gas natural que la empresa tiene en nuestro país, el número de clientes brasileños sigue siendo superior.
Iberdrola ya cerró 2010 como la primera distribuidora de energía eléctrica del nordeste de Brasil, con 30.650 gigavatios hora suministrados, y como la primera del país por número de clientes.
Impacto en las cuentas
La compra de Elektro (que se hará en efectivo y sin impacto ni para la deuda ni para el Ebitda de la eléctrica española) también va a tener efectos positivos sobre las cuentas de Iberdrola en Brasil.
La empresa pretende pactar con sus socios locales que Elektro pase a integrarse en Neoenergia. La unión de las dos sociedades hubiera supuesto una mejora significativa en los resultados proforma de 2010.
Así, las ventas conjuntas hubieran crecido un 37,6%, hasta los 5.287 millones de euros, con una aportación por parte de Elektro de 1.446 millones. En el caso del beneficio bruto de explotación (Ebitda), la mejora hubiera sido del 29%, llegando a los 1.647 millones de euros con la aportación de 370 millones por parte de la nueva compañía. El beneficio neto conjunto se hubiera situado en los 956 millones (763 millones por parte de Neoenergia y 193 millones por parte de Elektro), con un avance del 25,3%.
Iberdrola reiteró ayer que la operación de compra en Brasil encaja "a la perfección" con su actual estrategia, centrada en la expansión internacional en aquellos mercados que considera que tienen un mayor potencial de crecimiento, como el propio país latinoamericano, Estados Unidos, Reino Unido o México.
De esta manera, la eléctrica pretende diversificar su presencia geográfica, así como incrementar el peso de las áreas vinculadas al negocio regulado, al entender que aporta estabilidad, unos ingresos predecibles y que supone un menor riesgo. En esta línea hay que entender los últimos movimientos de compras y desinversiones realizados por Iberdrola en América.
Inversiones acumuladas de 2.785 millones
Desde su entrada en Brasil, en 1997, Iberdrola ha invertido un total de 2.785 millones de euros en el país, según los datos que maneja la compañía.En los próximos años, la eléctrica pretende destinar más dinero a mantener, mejorar y ampliar sus actuales infraestructuras de distribución, además de a construir nuevas centrales de generación hidroeléctrica y parques eólicos.De hecho, la empresa ya tiene en marcha nuevos proyectos de generación que suman 13.691 megavatios (MW) de potencia (1.130 MW atribuibles a Iberdrola), cuya producción ya está vendida gracias a contratos a largo plazo y que exigirán 1.198 millones de inversión hasta 2019.