Zapatero confía en el apoyo empresarial pese a haber abierto el debate sucesorio
El secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, dijo ayer que José Luis Rodríguez Zapatero cuenta con la confianza de los empresarios porque "está por las reformas" a pesar de que hace solo unos días el presidente de Banco Santander, Emilio Botín, pidiera al presidente del Gobierno que aplazara el debate sucesorio hasta 2012. El PSOE confirmó que Zapatero seguirá siendo secretario general hasta después de las elecciones generales.
Marcelino Iglesias comentó ayer, tras la primera ejecutiva federal desde que Zapatero anunció que no optaría a un tercer mandato, que el presidente del Gobierno "transmite mucha seguridad" al "mundo económico" porque "su objetivo y su prioridad" son las reformas. El Gobierno tiene entre manos la de las pensiones, la de la negociación colectiva y la del sistema financiero, principalmente. Siete días antes del anuncio de Zapatero de no concurrir más a las generales como cabeza de cartel, el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y los de Ferrovial y OHL pidieron al presidente del Gobierno que aplazara el debate sucesorio hasta 2012 para no interferir en la recuperación económica.
Ayer, conocida la decisión del jefe del Ejecutivo, el presidente de la CEOE, Juan Rosell, explicó que Zapatero "es libre" de decidir que no opta a un tercer mandato e instó a todos a no hacer de este anuncio un "problema". Los dirigentes de las principales empresas del país guardan silencio, de momento.
Iglesias relató lo acontecido en la reunión de la ejecutiva federal pero dio pocas pistas sobre la carrera sucesoria. "No hay candidatos", dijo. Los dos que más suenan -el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba, y la titular de Defensa, Carme Chacón- no tomaron la palabra durante la ejecutiva. Lo que sí dejó claro el secretario de Organización es que el PSOE "no tiene ninguna previsión" de adelantar el próximo congreso para elegir secretario general, por lo que se confirma que Zapatero seguirá siendo el líder socialista hasta después de las generales de 2012. Iglesias utilizó la palabra "euforia" para referirse al ánimo en el partido, pero rápidamente matizó que no era por la marcha de Zapatero sino porque el PSOE puede ahora centrarse de lleno en las elecciones de mayo. El próximo comité federal se celebrará el 28 de mayo y desde esa fecha en un plazo máximo de 45 días será elegido el candidato socialista a presidir el Gobierno.
Mariano Rajoy sostiene que la opción "más sensata" es la convocatoria de elecciones anticipadas
En la Ser, el líder del PP, Mariano Rajoy, reclamó ayer elecciones anticipadas pues es la opción "más sensata", y criticó la situación de "interinidad" en la que entra el Gobierno por la decisión de Zapatero, ya que no ayuda a solucionar los problemas económicos, en su opinión. Rajoy también subrayó que la renuncia de Zapatero solo es un "cambio de escenario" para el PSOE, no para los españoles. No obstante, descartó presentar una moción de censura. "Estamos ya en una grave crisis política, así que frivolidades las justas. No sirve ahora para nada ya que el PP la perdería ya que no tiene los votos suficientes".
Bono se apea y CiU mete presión al Gobierno
Los favoritos para la carrera sucesoria, Rubalcaba y Chacón, no dan pistas para centrar la atención en las elecciones de mayo pero otros se van descartando por sí solos. Ayer les tocó el turno a José Bono, presidente del Congreso, y a Trinidad Jiménez, titular de Exteriores.El ex ministro de Defensa ratificó en una entrevista en la Cadena COPE que no participará en las primarias pero se considera un "ayudante cualificado" para su partido. Por su parte, Jiménez reiteró que ella se descarta "desde el principio" del proceso de primarias y evitó referirse a los eventuales candidatos porque no sería "responsable" de su parte ni "respetuoso".Por otro lado, el presidente del grupo parlamentario de CiU, Oriol Pujol, amagó ayer con la posibilidad de que su formación acabe sumándose a las peticiones del PP de anticipar un año las elecciones generales si el Gobierno de Zapatero opta por seguir "peleándose" con Cataluña y reincide en su "deslealtad".Ayer el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, reconoció que CiU no puede condicionar la política del Gobierno español porque no lo tiene "cogido por el cuello", puesto que los socialistas pueden apoyarse en PNV o CC para sustentar su mayoría. El apoyo de CiU permitió el año pasado al Gobierno la aprobación de su plan de ajuste presupuestario.