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Javier Guerrero. Presidente del Consejo General del Notariado

"Las notarías han de dar muchos más servicios"

Representa a los 3.000 fedatarios españoles y asegura que las notarías han de prestar más servicios y "evitar molestias" al ciudadano.

Jienense, de 48 años, ejerce como notario en Las Palmas. Es el nuevo presidente del notariado por los votos de 12 de los 17 decanos, que representan el 57% de los notarios españoles y el 70% de los colegios.

Afronta su mandato con el 43% de los notarios en contra. ¿Es un colectivo dividido?

No creo que haya división, sino un cuerpo profesional vivo y dinámico.

¿Por qué convocó el pleno solo tres días después de renunciar su antecesor?

Valoré todas las circunstancias. Había que hacerlo antes de 30 días, pero convenía que un cargo tan importante no estuviera vacante. El plazo permitía perfectamente otras candidaturas.

¿Qué le parece reformar el reglamento notarial para que cada notario sea un voto?

El sistema actual es plenamente democrático. Tiene su fundamento en la estructura colegial. Hay 17 colegios que coinciden con las autonomías. Dicho esto, ante ese planteamiento yo nunca voy a rehuir ningún debate. Pero las modificaciones han de hacerse de forma serena.

¿No se sentiría más representado si en lugar de 12 decanos le hubieran votado 1.600 notarios?

No. Me amoldo a unas reglas. El 70% de los colegios y el 60% de los notarios me han votado.

¿Cuáles serán sus prioridades en el cargo?

Vamos a tratar de continuar con el proceso de reforzamiento de la función notarial. Es preciso que continuemos con nuestra labor de auxilio a la Administración, de colaboración, de lucha contra el blanqueo y el fraude fiscal. Y trataremos en ponernos a disposición de la Administración para toda una batería de competencias que pueden obtenerse por la vía de la desjudicialización. Es el caso del catastro, que va a dar una mayor centralidad a las oficinas notariales por cuanto que a través de ellas se subsanarán las diferencias entre la realidad física, la registral y la documental. Desde el punto profesional, en la sociedad en que estamos el notario tiene que convertirse en una oficina de servicios, tiene que dar muchos más servicios y tiene que evitar molestias a los ciudadanos. ¿Qué otros servicios? Me estoy refiriendo a la liquidación de impuestos, por ejemplo.

¿Qué supone para usted la sentencia del TSJ de Madrid que anula las compensaciones que reciben los cargos del consejo?

La sentencia se ha malinterpretado. En modo alguno rechaza la existencia de las compensaciones. Es más, reconoce el derecho de quien desempeña un cargo corporativo a compensarle. A partir de ahí, se trata de arbitrar una nueva fórmula para cuantificar ese perjuicio.

¿Esas compensaciones se siguen cobrando?

Ahora no podemos decir que se cobre o no se cobre. Las de 2010 tendrán que determinarse en junio de 2011.

¿Mejora la facturación de las notarías?

Al final de 2010 hubo un repunte. Quizá sea demasiado pronto para decir si es un cambio de ciclo. No parece. Más bien parece que el incremento de actividad venía por la finalización de las ventajas fiscales por la compra de vivienda.

Los notarios han tenido rebajas de aranceles. ¿Cuál es su posición?

La Administración tiene que garantizar la sostenibilidad de muchas notarías, que no están atravesando su mejor momentos.

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