Los aliados discrepan sobre el papel de la OTAN
Las disputas surgidas entre los aliados sobre el papel que debe ocupar la OTAN en la operación Amanecer de la Odisea hacen que asuntos como el embargo naval de armas a Libia quede pendiente.
El presidente de EE UU, Barack Obama, señaló ayer su intención de transferir el mandato de la operación militar "en días, no en semanas". Este anuncio se produce en un momento en el que los aliados tienen diferentes posturas sobre la función que ha de desempeñar la OTAN en la operación internacional. Hasta ahora no se conoce quién asumirá el mando y en qué condiciones.
EE UU junto a Reino Unido e Italia creen que la coalición internacional es un proceso de emergencia creado para cumplir con la resolución de Naciones Unidas. El objetivo de dicha resolución es el establecimiento de una zona de exclusión aérea sobre Libia para proteger a los civiles. Transcurridos los primeros instantes, tendría que ser la OTAN la encargada de asumir el control de la operación.
Turquía se niega a que Alianza participe en el ataque a Libia y considera que toda operación que se desarrolle deberá de prestar la máxima atención a las vidas humanas.
En el lado opuesto se encuentra Italia que reclama una mayor planificación y considera que la coalición debe tomar la iniciativa, según señala el ministro Franco Frattini. Exige que la OTAN asuma la coordinación de las operaciones militares para que puedan seguir prestando sus bases, las más próximas a Libia.
Por su parte, Irlanda declara mantener una posición neutral de forma que no participará directamente en el desarrollo de la intervención aunque, según su presidente, Mary McAleese, califica de positivo que tanto la ONU como las UE hayan reaccionado a la crisis del país africano de forma que recalcó su apoyo a la comunidad internacional en su objetivo de defensa de los derechos humanos.
Noruega que participa en el proceso con el envío de seis cazas F-16 ha optado por esperar a conocer cómo se desarrollan los acontecimientos y esperará a que exista un sistema de mando, algo que podría tardar varios días.
Pero los grandes enfrentados en estas disputas son Francia y Reino Unido. El primer ministro británico, David Cameron, quiere que la Alianza asuma lo antes posible el liderazgo. Por su parte, los franceses creen que la OTAN ha de ocupar un papel secundario.
En España, la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, apuesta por una coordinación con la OTAN, lo cual no quiere decir que sea la Alianza la encargada de asumir el protagonismo.