Estrellas y estrelladas en Bolsa
La cara y la cruz de la misma moneda. El terremoto que ha sacudido a Japón y la alarma nuclear que se ha desatado tras la catástrofe beneficia y perjudica a partes iguales. En Bolsa, las energías renovables son las ganadoras y las eléctricas se convierten en las principales damnificadas.
La catástrofe de Japón y los accidentes desencadenados en las centrales nucleares se está cobrando víctimas en cuanto a Bolsa se refiere. Sin embargo, no solo hay damnificados. Y es que algunas compañías también están saliendo beneficiadas de la situación y sus títulos están escalando posiciones en los mercados de renta variable.
Este es el caso de las compañías de energías renovables. Los inversores catalogan a las energías limpias como las sustitutas de las nucleares y esta visión ha impulsado la cotización de muchos valores de este sector. En el mercado español, Abengoa ha subido un 6,3% desde que el terremoto azotara a Japón, mientras que Fersa o Solaria han protagonizado una escalada mucho más imponente. Fersa ha sumado un 21% desde entonces y los títulos de Solaria se han disparado un 41%. No son las únicas. La alemana SolarWorld se ha revalorizado un 32% en Bolsa. Por su parte, la danesa Vestas ha ganado un 8%.
Sin embargo, compañías españolas como Iberdrola Renovables o Befesa cotizan a un precio similar desde el inicio de la catástrofe, al igual que Gamesa, que tan sólo ha sumado un 0,9%. Los expertos, pese a todo, son bastante positivos respecto al valor. En concreto, Rafael Romero, de Unicorp Patrimonio, considera que Gamesa "es una buena empresa que está en un sector con fuerte potencial debido a la escalada del precio del petróleo y los nuevos interrogantes abiertos con relación a la utilización de la energía atómica para producir electricidad. Las energías alternativas pueden tomar impulso y Gamesa se aprovechará de ello en Bolsa durante este proceso y si el negocio va mejorando, volverá a brillar con mucha fuerza, tal como lo hizo en el pasado".
Pero las consecuencias de la alarma nuclear no han sido igual de beneficiosas para otros sectores como el eléctrico. Compañías como RWE o Eon, que operan con electricidad que proviene en gran medida de centrales nucleares, han perdido terreno en Bolsa. En concreto, RWE se ha dejado un 7% desde el pasado jueves y Eon ha restado un 6%.
Asimismo, dos compañías francesas también han acusado los accidentes en Japón con números rojos. EDF ha retrocedido un un 8% y los acciones de Poweo han caído un 9,4%.
Por su parte, la operadora de la central nuclear de Fukushima, Tokyo Electric Power (Tepco), tampoco ha conseguido escapar de la quema y se ha situado como la mayor perjudicada. Sus acciones se han desplomado un 57% en cuatro jornadas.