El mar Caspio, ¿una región petrolera aislada? (II)
El mar Caspio es la nueva fuente más rica en petróleo. ¿Pero cómo llevar el petróleo aquí obtenido a los mercados que lo necesitan cuando se está tan alejado de los puertos marítimos? La mejor opción, la ruta del sur, está cerrada pues habría que pasar por Irán o Afganistán. Unocal Corporation, la compañía de California, negoció con el Gobierno talibán la construcción de un oleoducto que desde el mar Caspio atravesase Turkmenistán y Afganistán y desembocase en Pakistán. Este tendría una longitud de 1.040 kilómetros, un diámetro de 106 centímetros y una capacidad de transporte de un millón de barriles al día. De su extensión total, 708 kilómetros pasarían a través de Afganistán. El bombardeo por Al Qaeda de las embajadas americanas de Kenia y Tanzania suspendió el proyecto.
Los países del mar Caspio necesitan diferentes rutas para exportar su petróleo y gas. ¿Pero qué quisieran Rusia, Europa, Estados Unidos y China?
Las conducciones que existían en la zona del mar Caspio fueron construidas en la época de la URSS y se dirigen hacia el norte y al este, o sea hacia Rusia. El oleoducto CPC de origen ruso va a ser ampliado. Tiene 1.500 kilómetros y finaliza en el puerto ruso de Novorossiysk, en el mar Negro. Los accionistas del consorcio que gestiona CPC son la Federación Rusa (24%), la República de Kazajistán (19%) y diferentes compañías de petróleo, entre las que se encuentra Chevron con un 15% del capital.
Chevron ha logrado obtener del campo de Tengiz kazako 540.000 barriles al día. La petrolera se había negado a aumentar las inversiones que incrementasen la producción hasta que no se resolviese la ampliación de CPC. Rusia se quejaba de que las tarifas de transporte del crudo eran muy bajas y los tipos de interés de los préstamos necesarios para la ampliación del conducto eran muy altos. Gran parte de las demandas de Rusia fueron finalmente aceptadas. La nueva ampliación va a aumentar la capacidad de transporte hasta 1,34 millones de barriles al día. Para ello varios kilómetros de tubo serán reemplazados, 10 nuevas estaciones de bombeo y 6 nuevos tanques de almacenamiento serán construidos, así como un tercer dique de atraque offshore en Novorossiysk.
El nuevo oleoducto Baku-Tbilisi-Ceyhan (BTC) ya está en funcionamiento. Tiene 1.768 kilómetros y con su construcción se han cumplido varios objetivos: se ha reducido la dependencia de las tuberías rusas, se ha evitado Irán y se elude el estrecho del Bósforo ya congestionado y en el que las autoridades turcas han impuesto estrictas reglas de navegación. BTC nace en Bakú (Azerbaiyán), transcurre por Georgia y se adentra en Turquía hasta Ceyhan en el mar Mediterráneo, en donde el petróleo es cargado en petroleros hacia los mercados internacionales. El coste total ascendió a 3.009 millones de euros. Del total de kilómetros, 249 transcurren en Azerbaiyán, 443 en Georgia y 1.076 en Turquía. Los tubos están enterrados a lo largo de todo su recorrido por razones de seguridad y avanzan muy cerca de zonas conflictivas, pues pasan a 55 kilómetros de Osetia del Sur y cerca de la región georgiana secesionista de Abjasia. BTC está operado por BTC Company cuyo máximo accionista es BP. Parte del año 2008 estuvo cerrado a causa del conflicto Rusia-Georgia. Hay especialistas que opinan que esta guerra fue un serio aviso de Rusia a Estados Unidos y Europa, para recordarles que no ha perdido el liderazgo en esta parte del mundo. Su capacidad de transporte es de un millón de barriles al día y desde que se inauguró en junio del 2006 hasta julio de 2010, 1.205 petroleros han salido cargados de Ceyhan. Está proyectado que se una a BTC en Bakú una nueva conducción que vendría de Kazajistán y cruzaría el mar Caspio por el fondo. Rusia e Irán se oponen a esta conexión submarina, utilizando diferentes argumentos, como la defensa del medio ambiente.
La Comunidad Europea necesita diversificar sus fuentes de gas. El último conflicto entre Rusia y Ucrania ha aumentado aun más este deseo. Para ello planea construir el gasoducto Nabucco de 3.298 kilómetros con un coste de 8.795 millones de euros, que podrá transportar 31 billones de metros cúbicos por año. Este sería el conducto más caro nunca construido. El gas sería traído del mar Caspio vía Azerbaiyán, Georgia, Turquía, los Balcanes y Austria y provendría de Azerbaiyán y países limítrofes. Con ello se evitaría Ucrania y Rusia. La Comunidad Europea quiere reducir la dependencia de Gazprom, que aporta el 40% del gas consumido por Europa, y responder al incremento de consumo que se espera para los próximos años. Gazprom ha ofrecido a Azerbaiyán comprarle todo el incremento de producción de gas a precios de mercado, sin obtener respuesta hasta el momento.
¿Y China, país vecino de Kazajistán? Pues se ha construido el oleoducto Kazajistán-China de 2.200 kilómetros hasta Alashankou, en la región China de Xinjiang, que está explotado conjuntamente por la compañía kazaka KazMunaiGaz y su socio chino CNPC.
Ramón Boixadós. Economista y profesor de Esden Escuela de Negocios