Las cajas buscarán en Asia el apoyo inversores privados
La Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) iniciará este martes una gira por Asia para explicar a los inversores internacionales la reestructuración del sector, así como su modelo de capitalización nacido de la Ley de Cajas y del nuevo decreto ley que eleva las exigencias de capital del sector.
El viaje puede suponer un impulso para las cajas de ahorros, ya que muchas entidades optarán por salir a Bolsa para captar capital y necesitarán el apoyo de inversores privados. Además, la patronal tendrá la oportunidad de defender la solvencia y fortaleza de estas entidades, que han reducido su capacidad en un tiempo 'record', pasando de 45 a 17 entidades.
El director general adjunto del Área Operativa y Financiera de la CECA, Jorge Gil Lozano, encabezará la delegación española, que comenzará su viaje en Pekín el día 1 de marzo, para dirigirse el día 2 a Singapur, el día 3 a Hong Kong y el día 4 a Tokio.
La patronal ha elegido para su presentación las principales ciudades económicas de la región en un momento decisivo para el sector, ya que las entidades que quieran salir a Bolsa deberán comunicar su estrategia al Banco de España durante el mes de marzo.
En concreto, las entidades que a 10 de marzo no alcancen el nivel requerido de capital principal tendrán 15 días hábiles para comunicar al Banco de España el plan a seguir, que puede incluir la captación de recursos de terceros o la salida a bolsa, así como el calendario de cumplimiento.
Sin embargo, la norma amplía el plazo máximo para la salida a bolsa a marzo de 2012 si las entidades han presentado antes del 30 de septiembre un acuerdo de la junta o asamblea general sobre la operación, un calendario detallado de ejecución y haber otorgado mandato a una o varias entidades. Hasta ahora sólo La Caixa, Banco Financiero o Banca Cívica han mostrado interés por salir al mercado.
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, defendió el pasado lunes que la nueva norma ofrece suficientes elementos para tranquilizar a los mercados porque aquellos que "no quieran mirar las cifras" sobre la situación del sistema financiero español tienen la garantía de que todas las entidades españolas contarán con un mínimo de capital del 8% y del 10% en otros casos.