Repsol entra en Angola, una de las cuencas con más futuro de África
La petrolera española ha dado un importante paso al adjudicarse tres bloques exploratorios en aguas de Angola, en una cuenca geológicamente comunicada con la cuenca de Santos, en Brasil. En los bloques, que compartirá con la estatal angoleña Sonangol y con otras petroleras, tendrá una participación de entre el 20% y el 30% y en uno de ellos será el operador. El país africano cuenta con unas reservas de 30.000 millones de barriles equivalentes de petróleo.
Repsol se acaba de adjudicar tres bloques de los once que habían sido licitados a lo largo de 2010 por el Gobierno de Angola para explorar en la zona offshore del presalino de la cuenca de Kwanza. Así lo confirman a CincoDías fuentes de la petrolera, que califican dicha cuenca como la "más prometedora" de las que se han licitado en esta ronda en África. El servicio geológico de Estados Unidos estima, de forma conservadora, que Angola puede albergar recursos de 30.000 millones de barriles equivalentes de petróleo, cantidad similar a las reservas existentes en países como Nigeria o Qatar.
En los tres bloques en los que Repsol ha logrado entrar, la petrolera estatal angoleña Sonangol tiene una participación del 50%, aunque no operará ninguno de ellos. Se trata del bloque número 22, en el que el grupo que preside Antonio Brufau será el operador con un 30% de la participación, mientras que Statoil se ha adjudicado el 20% restante. En el bloque número 35, con un 25% del total, la española tiene como socio a Eni, que lo lidera con el 30%, y en el bloque 37, en el que Repsol tiene un 20%, es Conoco quien lo dirigirá, con una participación del 30%.
Los geólogos de Repsol consideran que la cuenca de Kwanza es "la continuación de la prolífica cuenca de Santos en el offshore brasileño". Este modelo geológico se basa en la separación de África y Suramérica, donde Angola correspondería a la costa brasileña. El extenso trabajo realizado por Repsol en Brasil permitirá trasladar estos modelos a la costa angoleña, al tener "un profundo conocimiento de antemano que aporta ventajas a la hora de procesar y valorar los datos sísmicos que se obtengan".
La zona del presalino de este país africano es vista por muchas de las petroleras europeas como una oportunidad para resarcirse de su fracaso en Brasil, que, en unos casos, abandonaron antes de tiempo y, en otros, pagaron caro por incorporarse demasiado tarde, cuando ya se habían producido los grandes descubrimientos. Brasil abrió en la pasada década la puerta a la exploración de megacampos en aguas profundas del Atlántico, actividad que se circunscribía prácticamente al golfo de México.
Según aseguran fuentes de Repsol, la última ronda de licitación en Angola ha sido muy disputada ya que hay un mayor número de compañías con el conocimiento técnico para perforar en sus aguas y este tipo de prospecciones se ven como el futuro de la industria después de que una gran parte de los yacimientos en tierra y en aguas someras hayan sido descubiertos y puestos en explotación.
Junto con Repsol las grandes ganadoras de las rondas de licitación del presalino Angoleño han sido Statoil (que ha puesto un empeño especial para contrarrestar el declive de sus campos en el mar del Norte), Total y BP.
Un 'calidoscopio' para los nuevos bloques
El éxito exploratorio de Repsol en Brasil se explica en buena parte por el proyecto Calidoscopio para el procesado de imágenes sísmicas. Según la compañía, para procesar datos de Angola volverá a utilizar este mismo sistema, que le ha permitido "ver con más claridad que otras compañías las formaciones petrolíferas que hay bajo una gruesa capa de sal y perforar con una tasa de éxito mayor que la media de la industria". Teniendo en cuenta un coste de 100 millones de dólares por cada pozo, "esto aporta ahorros significativos ya que se perforan menos pozos secos".Calidoscopio permite procesar imágenes sísmicas seis veces más rápido que con métodos tradicionales, acelerando el trabajo exploratorio para entrar antes en producción, según la petrolera.La presencia de Repsol en Angola se remonta a diciembre de 2007, cuando firmó, junto con Gas Natural, un acuerdo con Sonangol Gas Natural (Sonagas) para llevar a cabo trabajos de desarrollo de un proyecto integrado de gas en el país. Esta iniciativa consiste en evaluar las reservas de gas para, posteriormente, acometer las inversiones necesarias para desarrollarlas y, en su caso, exportarlas en forma de gas natural licuado.De acuerdo con la planificación, Repsol y Gas Natural, a través de la empresa Gas Natural West Africa (GNWA), han participado en los trabajos de exploración que en la actualidad desarrolla Sonagas, el operador del consorcio, en el que GNWA posee una participación del 20%, seguido de Sonagas, con el 40%; Eni, con el 20%; y Galp y Exem, con un 10% respectivamente.En el marco de este acuerdo, se ha establecido una sucursal en Luanda y ha obtenido la concesión de gas y derechos mineros del Gobierno de Angola.
Las cifras
30.000 millones de barriles equivalentes de petróleo son las reservas que se estiman en Angola, tercer país en reservas y producción, después de Nigeria y Argelia y Libia.3 veces se podrían multiplicar las reservas de Angola con los descubrimientos de la cuenca de Kwanza.