Defensa pagará la carrera y un sueldo al futuro médico militar
El objetivo es paliar la escasez de profesionales interesados en el ejército.
Cuando en 2008 el Ministerio de Defensa decidió abrir la puerta a facultativos latinoamericanos para paliar el déficit de médicos militares, el ejército perdía una media de 50 doctores al año. El año anterior, ni un sólo médico solicitó entrar en Defensa. Desanimados por un menor salario -un 30% menos de media que en la medicina civil-, los médicos militares han protagonizado en los últimos años una verdadera fuga de talento.
El intento de importar profesionales latinoamericanos no ha dado resultado y como consecuencia de ello Defensa ha decidido lanzar una oferta tentadora para atraer profesionales. Como informó ayer la Cadena Ser, el Ministerio que dirige Carme Chacón ofrecerá a los estudiantes dispuestos a convertirse en médicos militares estudiar Medicina gratuitamente, con mínima instrucción y sueldo militar. La primera oferta de plazas pretende convocarse en los próximos 12 meses.
Para formar a esa nueva hornada de médicos, Defensa realizará convenios con universidades públicas. A los aspirantes se les exigirá las pruebas físicas de acceso a las Fuerzas Armadas; una vez superadas se les seleccionará por nota de corte. Los estudiantes elegidos disfrutarán de estatus de soldado y al finalizar la carrera saldrán con grado de teniente. Para evitar la sangría de talento que ha asolado el cuerpo militar de sanidad en los últimos años, se les impondrá un compromiso de permanencia en el ejército de 12 años. La iniciativa del Ministerio de Chacón verá sus primeros frutos en el plazo de siete años, momento en que finalizará su formación la primera promoción.
En los últimos años el ejército ha llegado a perder 50 facultativos al año
Además del gancho de los estudios gratis y el sueldo, la principal ventaja del cambio de modelo es la eliminación de la necesidad de realizar una oposición para acceder al cuerpo. Hasta el momento, para convertirse en médico militar hay que realizar una oposición que incluye una prueba de conocimientos generales; un examen tipo test sobre conocimientos mécios; una prueba de lengua inglesa y una prueba psicológica. Además de todo ello, se exigen pruebas físicas y concurso de méritos.
Pilotos
El plan de formación de Defensa tiene un precedente con ciertas similitudes en el cambio del modelo de ingreso en la Academia General del Aire que se puso en marcha en 2010 y que supuso la desaparición de la oposición. Desde esa fecha, el aspirante a piloto militar debe tener el bachillerato y la prueba de ingreso a la universidad aprobada para ingresar en la Academia General del Aire como en cualquier facultad española: por nota de corte. Durante los cuatro primeros años de formación, los futuros pilotos realizarán, además de instrucción militar, un grado de ingeniería de gestión industrial.
Jurídicos e interventores
Entre los profesionales que cambian la vida civil por la militar destacan los jurídicos y los interventores militares. Ambos acceden a las Fuerzas Armadas tras haber realizado una licenciatura y habar superado una prueba de concurso-oposición. El ingreso en el Cuerpo Jurídico Militar es necesario contar con la licenciatura de Derecho y superar dos ejercicios orales de 70 minutos cada uno -en el caso del ingreso como militar de carrera- o uno escrito de cuatro horas en el caso de ingreso como militar de complemento. El año pasado se convocaron 4 plazas como militar de carrera a las que se presentaron 84 aspirantes. En el caso de los interventores, que pueden tener la licenciatura en Derecho, Económicas, Administración de Empresas o Ciencias Actuariales, la oposición es una prueba escrita de conocimientos, otra oral y otra práctica de contabilidad.