Mas plantea un pacto fiscal para evitar la "frustración" de Cataluña
Ofrece a Salvador Alemay que forme un equipo asesor.
El futuro presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, propuso ayer una "transición" política con el objetivo de alcanzar un amplio consenso político en 2011 para plantear un pacto fiscal en la línea del concierto económico vasco. El aún candidato destacó esta vía para evitar un elevado nivel de "frustración".
De esta forma, Mas verbalizó en su discurso como candidato a la investidura su idea central en la campaña electoral, y dio a entender que no piensa en convocar un referéndum de autodeterminación, porque antes habrá que buscar "mayorías amplias cualificadas" ante el peligro de "dividir la sociedad catalana en dos mitades". Tras las elecciones generales de 2012, el equipo de CiU concretará su propuesta de pacto fiscal al nuevo Gobierno central. El próximo presidente catalán recalcó también que recortará gastos en la administración y no subirá los impuestos.
En el debate posterior, el presidente del PSC en el Parlament, Joaquim Nadal, expresó su recelo ante la "segunda transición" prevista por Artur Mas, por la posibilidad de que suponga una "independencia a plazos". Nadal señaló que, en realidad, lo que quiere el próximo presidente catalán es tener las manos libres para pactar con quien gane las elecciones generales.
Nadal, que ya avanzó que votará en contra de la investidura, pidió a Mas que convoque una cumbre anticrisis, recogiendo una de las principales propuestas de la campaña del aún presidente en funciones de la Generalitat, José Montilla. Artur Mas recogió la proposición de forma positiva.
Por otra parte, el líder de CiU desveló el futuro que ha reservado al presidente de la compañía de infraestructuras Abertis, Salvador Alemany, que sonaba para ocupar el departamento de Economía. En su discurso, Mas pidió a Alemany, como presidente del Círculo de Economía, que constituya un consejo asesor, sin retribución, en temas de economía. De la misma forma, realizó el mismo encargo al máximo responsable del Colegio de Médicos de Barcelona, Miquel Vilardell, en este caso para crear una asesoría en materia de política sanitaria.