Merkel pide a los líderes europeos que tengan el "coraje" de exigir responsabilidades a los mercados
La canciller alemana, Angela Merkel, ha afirmado que los líderes políticos europeos necesitan el coraje para hacer que los inversores privados compartan los riesgos de futuras crisis de deuda en la eurozona y demostrar así a los mercados financieros quiénes están al frente de la situación.
"¿Cuentan los políticos con el coraje necesario para que aquellos que ganan dinero compartan también los riesgos? ¿O es que negociar con deuda pública es el único negocio en el mundo que no pude implicar riesgos?, se preguntó Merkel en un discurso ante el Parlamento alemán.
"Se trata de la primacía de los políticos y los límites de los mercados", reiteró la canciller germana, quien admitió que su insistencia en esta cuestión puede haber provocado el "nerviosismo" de los mercados.
De hecho, la líder alemana de centro derecha ha recibido múltiples críticas de distintos estamentos de la UE que le acusan de desencadenar las ventas de deuda irlandesa con su propuesta de establecer un mecanismo de resolución de futuras crisis en el que los inversores privados serían obligados a asumir parte de las responsabilidades de potenciales rescates.
Merkel ha repetido en varias ocasiones que "no es mejor europeo necesariamente quien en primer lugar ayuda a los demás países miembros, sino aquel que adopta medidas para fortalecer el euro a largo plazo".
Salgado no ve oportuna la idea de Merkel
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, no considera "oportuno" el planteamiento de la canciller alemana, Angela Merkel. "No es una declaración oportuna", ha señalado Salgado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), donde, sin embargo, ha mostrado "su máximo respeto" porque cada dirigente puede decir lo que considere oportuno.La vicepresidenta económica ha asegurado que los países seguirán trabajando conjuntamente con más reuniones en los próximos días para avanzar en la gobernanza económica común y la creación de un mecanismo de estabilización del euro más allá del año 2013.