Los economistas exigen más autonomía financiera para los ayuntamientos
El Registro de Economistas Asesores Fiscales pidió ayer profundos cambios en los tributos locales para aumentar la capacidad recaudatoria de los municipios y elevar su autonomía financiera, ya que "de su actividad solo depende la mitad de sus ingresos".
El pinchazo de la burbuja inmobiliaria ha dejado seriamente dañadas las arcas municipales. En 2007, los ingresos derivados de la actividad constructora representaban un 7,7% del total recaudado; un año después, último dato disponible, ese porcentaje se redujo dos puntos, hasta un 5,7%. Y ha seguido disminuyendo hasta dejar el margen de autonomía financiera de los entes locales en poco más de la mitad de sus ingresos, es decir, que de su gestión solo depende el 54,8% de lo que recauda.
"Es imprescindible afrontar una reforma de la financiación local ya que los municipios han asumido una serie de competencias que no les corresponden y no tienen capacidad para financiarlas. O bien se les ayuda desde el Estado o las comunidades autónomas o bien se limitan esas competencias", aseguró ayer Jesús Sanmartín, presidente del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), durante la presentación del segundo panorama de fiscalidad local.
Y para poder subsanar ese desfase entre ingresos y gastos, María José Portillo, profesora de la Universidad de Murcia y autora del informe, propuso varías vías para elevar la autonomía financiera. "Por la vía del gasto sería imprescindible auditar las partidas relativas al gasto corriente en bienes y servicios, que suponen el 32% del total y dónde existen margen para el ahorro. De esta manera se conseguiría un mayor control del gasto público", recalcó durante la presentación.
En el caso de los ingresos, Sanmartín sugirió la creación de un catálogo de servicios para definir cuáles corresponden a la administración local. "Una vez delimitados, a lo mejor debería ser el momento de prestar menos servicios o prestar los mismos encareciéndolos a través de las tasas". Una vía que ya esta siendo explotada por los municipios, como demuestra el hecho de que casi recaudan lo mismo por IBI que por tasas.
El informe pone énfasis en la necesidad de iniciar una revolución en algunas de las grandes figuras impositivas de los municipios. Por un lado solicitan la desaparición o la modificación del impuesto de actividades económicas (IAE) por su efecto discriminatorio, al solo afectar a las empresas con una facturación superior a un millón de euros, y la revisión del impuesto de vehículos de tracción mecánica (IVTM, o circulación). "Ha quedado obsoleto al modularse por caballos fiscales. Debería estar ligado a la contaminación de los vehículos para evitar los problemas de deslocalización", recalcó Sanmartín. Finalmente pidió cambios en la plusvalía municipal (técnicamente conocida como IIVTNU), "que grava una plusvalía que también tributa en el IRPF, por lo que se trata de una doble imposición".