El banquero académico
¿Empresario o catedrático? Las dos cosas. El director del Instituto de la Empresa Familiar es el candidato de consenso para presidir la nueva Catalunya Caixa.
Es uno de los hombres mejor relacionados del mundo de los negocios. Y un intelectual de la economía. Fernando Casado Juan es el candidato de consenso para presidir Catalunya Caixa, la segunda caja de ahorros de Cataluña, fruto de la fusión entre Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa. Las Diputaciones de Barcelona (PSC) y Tarragona (CiU), que ejercen la tutela de las entidades, han dado su visto bueno a quien durante 17 años ha sido el director general del Instituto de la Empresa Familiar (IEF). El próximo 16 de noviembre se constituirá la nueva asamblea y se designará el nuevo consejo de administración, la nueva comisión ejecutiva y al nuevo presidente. Su cargo no será ejecutivo, pero su conocimiento del mundo de la empresa, su fe en el buen gobierno societario, su rigor académico y su visión innovadora le señala como el revitalizador que necesita la nueva caja, una de las entidades españolas que suspendió las pruebas de estrés.
Tiene 67 años y por su criterio y señority ha estado presente en muchas de las grandes reformas económicas. Siempre desde el anonimato. Aldo Olcese, presidente de la Sección Segunda de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras -Casado es vicesecretario de la Junta de Gobierno-, cree que le habrá costado trabajo aceptar estar al frente de la caja. "Le sitúa en un plano de notoriedad que no le gusta y atrae sobre él la atención de procesos con implicaciones políticas evidentes", afirma.
Este barcelonés, artífice de la presencia española en los principales foros de la empresa familiar, es para Olcese "un amigo entrañable". Fue el director del IEF quien contestó el discurso de entrada de Aldo Olcese en la Racef. "Era un discurso muy controvertido sobre la nueva economía y el mercado de capitales. Fernando Casado aceptó encantado la réplica, porque es un hombre atrevido, intuitivo para la modernidad y comprometido, no rehúye sus responsabilidades". Su nombramiento como presidente de Catalunya Caixa no le ha sorprendido. "Es muy buena noticia para el sector".
Se han barajado varios candidatos, pero Fernando Casado suscita el agrado de partidos políticos, del Banco de España, del Ministerio de Economía y la Generalitat. Han sido sus interlocutores durante los años en que ha sido el representante de las grandes empresas familiares españolas. Les ha abierto las puertas del congreso que el lobby empresarial celebra cada año; el último, el pasado 25 de octubre, tres días antes de que trascendiera su nombramiento como presidente de Catalunya Caixa. Los medios reflejaron la sorpresa de esta elección por su falta de experiencia en el sector financiero. Sus investigaciones académicas, sin embargo, revelan que el catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados tuvo cierta influencia en el sector.
José María Gasalla, profesor de Recursos Humanos de Esade, recuerda que la actividad de Casado estuvo al principio enfocada a los temas de estrategia y marketing. Fernando Casado se doctoró en 1976 con la tesis Marketing bancario, asunto principal de los dos libros de los que es autor: El Marketing en la banca (1980) y Marketing estratégico para los 80 (1982), éste último realizado conjuntamente con Luis de Borja Solé. Obras que eran un referente en el sector al que se dedicará a partir de ahora, según Gasalla.
Las trayectorias de estos dos profesores se cruzaron hace más de 20 años. En este tiempo han coincidido en tribunales y presentaciones de tesis doctorales. Antes del verano, Gasalla le pidió un prólogo para un libro que estaba escribiendo sobre una empresa familiar (Quien lidera, confía. Empresa activa. Escrito en colaboración con Leila Navarro). A Casado le pareció muy atractivo. "José María, tengo poco tiempo -le advirtió-, pero te escribo el prólogo", cuenta Gasalla.
La discreción es una de sus armas. "Es un trabajador incansable, pero nunca en el front office", señala Josep Tàpies, titular de la cátedra de Empresa Familiar del IESE. Cuando tuvo noticia de su nombramiento, Tàpies felicitó a Casado y éste, haciendo gala de prudencia, observó que su cargo tendría que ser ratificado en la Asamblea. Posee también, una interesante red de contactos -networking-. Fernando Casado llegó al IEF en 1993, en sustitución de Alfredo Pastor, que pasó a secretario de Estado de Economía. Empresas como Capgemini, Media Planning, N más 1 o Ernst & Young lo sientan en su consejo asesor.
Su vinculación con el mundo empresarial ha resultado de gran ayuda a la universidad. Elisenda Paluzie, decana de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona (UB) donde Casado imparte sus clases, le agradece también haber llevado a la universidad a empresarios como Isak Andic, Miguel Torres, Marc Puig o José Manuel Lara, a través de la cátedra que el IEF tiene en la UB -la organización tiene una red de 36 cátedras que forman a una media de 1.800 alumnos al año en España-. "Muchos estudiantes aspiran a conseguir un puesto de trabajo en una caja de ahorros o en la Administración. La experiencia de estos empresarios nos ayuda a fomentar la olvidada cultura del emprendimiento", señala Paluzie.
La internacionalización ha sido otro de sus retos. Paluzie recuerda que cuando Casado fue decano, de 1989 a 1993 (dos mandatos), puso todo su empeño en firmar los primeros convenios Erasmus de la universidad. Como presidente de la Escuela de Administración de Empresas, ha sido el precursor de la internacionalización de la escuela, sobre todo en Latinoamérica, lo que impulsó el nacimiento de programas bilingües y la llegada de alumnos de países europeos y americanos.
Esta defensa de la apertura al exterior es el reflejo de su actividad en el IEF, "su gran logro", opina Olcese, porque no ha sido fácil convencer a las empresas familiares de la necesidad de internacionalización. Así como su compromiso con el buen gobierno. Una lección que ha sabido transmitir a uno de sus cuatro hijos, Fernando Casado Cañeque, asesor de Naciones Unidas y autor del libro La RSE ante el espejo. Uno de sus últimos jefes en el seno de la empresa familiar, Simón Pedro Barceló, copresidente del Grupo Barceló, le apoya en su aventura bancaria: "Sus conocimientos de economía y su carácter conciliador y discreto le permitirán desarrollar un gran papel al frente de la caja".