Una factura que bien vale un riñón
¿Se hace una idea de lo que cuesta una operación de hernia o de vesícula? ¿Sabe lo que debería desembolsar por una intervención de cataratas de no ser por la gratuidad de la Seguridad Social?. La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía comenzó ayer un programa para informar a los usuarios sobre lo que su atención sanitaria supone a las arcas públicas mediante facturas informativas.
El programa se estrenó en el Hospital Costa del Sol de Marbella (Málaga) con un doble objetivo: informar y concienciar. La iniciativa responde "a una voluntad de transparencia puesto que los ciudadanos tienen derecho a saber a dónde van sus impuestos", apuntan desde la Junta. Es además, "una forma de corresponsabilizar a los usuarios de los gastos sanitarios" puesto que su gratuidad no implica ausencia de coste para los ciudadanos. La sanidad acapara un tercio del total del presupuesto andaluz.
Operar una hernia, 1.147 euros. Una intervención de cataratas, 1.147 euros. Y una prueba de diagnóstico como una colonoscopia, 202 euros. La salud no tiene precio, pero el material, los salarios de los profesionales que intervienen y los servicios de luz, limpieza, seguridad o administración que hacen posible el correcto funcionamiento de un hospital en Andalucía, sí lo tienen. El resto de hospitales de la región incorporará escalonadamente este programa que cubre el coste de los procedimientos más frecuentes -aproximadamente el 50% de la actividad asistencial-. La Junta prevé que para finales de 2011 toda la red sanitaria disponga ya de este servicio de información a los enfermos.
Pero la también llamada facturación en la sombra no es una iniciativa nueva. A mediados de la década de los noventa ya se había llevado a cabo una propuesta parecida en toda Cataluña, según explican desde la Generalitat de Cataluña. Durante un lustro, los enfermos de la mayoría de hospitales en Cataluña recibieron la traducción monetaria de su asistencia sanitaria.
"La medida tenía el objetivo de sensibilizar sobre el coste sanitario", señala el gerente de compra y servicios del Catsalut, Josep Maria Argimon. En su opinión, este tipo de iniciativas perviven un tiempo ya que su objetivo es concienciar a la población sobre los costes reales de la sanidad. Y tras diez años, "es buen momento para recomenzar esta actividad en Cataluña. No sólo para servicios hospitalarios, sino también para planes terapéuticos".
La cifra
28.000 euros le cuesta a las arcas públicas, aproximadamente, una operación de trasplante de riñón en la sanidad catalana.