La apacible Venecia portuguesa
Aveiro ofrece calidad de vida en el entorno privilegiado de una hermosa ría atlántica.
Lisboa, el Algarve y algo menos Oporto han conseguido romper por completo el tradicional desconocimiento español sobre las bellezas y calidades de nuestro vecino. Pero Portugal aún tiene extensos kilómetros de costa y amplias extensiones de bosques -que esperemos sean respetados por los incendios en lo sucesivo-, casi desconocidos por lo general para el viajero del otro lado de la frontera.
Un ejemplo especialmente curioso es el de Aveiro, la ciudad de mayor renta per cápita y número uno en las distintas estadísticas sobre calidad de vida en su país. Está unida por autopista, en línea recta de 300 kilómetros, con Salamanca, y los ciudadanos de esta provincia la tienen como su costa de referencia, pero no recibe muchos otros visitantes españoles pese a su belleza y proximidad.
Situada en la ría que le da nombre, lo que más llama la atención de la ciudad es la modesta pero hermosa red de tres canales que la unen con el Atlántico. El sobrenombre de Venecia portuguesa tiene un punto exagerado, si bien el recuerdo de la ciudad italiana es inevitable en algunas vistas concretas de la ría principal. Eso sí, en lugar de góndolas encontramos aquí unas barcazas bastante más amplias y a motor, con la quilla en punta y decoradas con dibujos en ocasiones sensuales, conocidas como moliceiros. Algunas barcas hacen un recorrido turístico interesante, de varios kilómetros, hasta acceder el mar; la ría en su conjunto, de 42 kilómetros de longitud y en la que desembocan tres ríos distintos, es raramente recorrida por completo en barco.
Los moliceiros, de punta curvada hacia arriba, son las embarcaciones con las que aún hoy se recorre la ría
El casco antiguo de Aveiro tiene como protagonistas a una serie de edificios con fachada art nouveau, que rememoran la etapa de máximo esplendor de la localidad, a comienzos del siglo XX. En algunas fachadas destacan en particular los trabajos en azulejería, que son dominantes también en una población situada al otro extremo de la ría, Ovar. El barrio tradicional de Beira Mar, el de sabor más pescador, ahora está en parte ocupado por universitarios y tiene un cosmopolita ambiente nocturno. Entre los monumentos más destacados de la ciudad pueden mencionarse igualmente la catedral o el museo de los pescadores.
La costa propiamente dicha se encuentra a una decena de kilómetros. La playa más próxima es la de Barra, dominada por un faro que es el tercero más alto del mundo. Aunque la imagen playera que más habitualmente se asocia con Aveiro es la de las casas rayadas de Costa Nova, que conforman un paseo de indudable belleza frente a la ría, en un recorrido salpicado por atractivas marisquerías.
El mar abierto aquí no suele ser muy amistoso: salvo en días de verano, el viento azota con fuerza y las olas invitan más a los expertos del surf que a los nadadores casuales. Eso sí, las interminables extensiones de las playas, cuya arena dibuja caprichosas dunas, invitan a un recorrido tranquilo, y preferiblemente algo abrigado. El paraje más hermoso de este tipo es un espacio protegido, la Reserva Natural de las Dunas de San Jacinto.
El recorrido por la ría nos conducirá a vislumbrar las pirámides resplandecientes de las salinas, fuente de ingresos tradicional de la comarca. Es digna de visita la pequeña localidad pesquera de Torreira, que conserva el sabor tradicional pesquero de esta zona de Portugal. Y en otro ámbito de actividad totalmente distinto, también se encuentra muy próximo en dirección a Oporto, junto al pueblo de Santa Maria da Feira, el museo Visionárium, elegido hace dos años como el mejor centro de enseñanza de la ciencia en toda Europa.
Guía para el viajero
Cómo llegar. El aeropuerto más próximo es el de Oporto, ciudad unida con Aveiro por trenes que salen cada hora. Hay vuelos con Oporto desde Madrid, por ejemplo, de Iberia, Spanair o Tap. Por carretera, Aveiro está comunicada mediante autopista directa tanto con Galicia como con Salamanca y Lisboa.Dónde dormir. Una de las más hermosas instalaciones de la red de Pousadas portuguesa, la de Torreiro-Murtosa, se encuentra situada directamente sobre la ría de Aveiro, y tiene apenas 19 habitaciones para un relax total (tel. +351 234 860 180). En el propio Aveiro, Meliá abrió en la última década un moderno cuatro estrellas próximo a la feria de la ciudad y en un extremo de la ría principal (+351 234 401 000). Para la playa de Barra, una opción es el Hotel Barra (+351 234 369 156).Dónde comer. El producto del mar y el inevitable bacalao mandan en las mesas de la región. El producto más fresco puede encontrarse en el Restaurante Mercado do Peixe (+351 234 383 51), situado en el piso superior de la propia lonja de la ciudad, y que presenta una suerte de caldereta, la cataplana, como plato estrella. Sal Poente (+351 234 382 674), en un viejo caserón salinero restaurado, ofrece alguna original propuesta marina como la almeja a la bulhao pato.