La industria vasca asume que hay que volcarse en el exterior
La internacionalización es ya una necesidad para el sector fabril de Euskadi, que admite que hay que abrir fábricas fuera para crear empleo y riqueza en la comunidad autónoma.
Ocho compañías vascas, la mayoría del sector industrial, expusieron ayer en San Sebastián sus proyectos en los mercados exteriores, en unas jornadas sobre internacionalización organizadas por Caja Madrid y CincoDías. Iñaki López Gandásegui, presidente del grupo aeronáutico Aernnova, sintetizó el espíritu del encuentro al manifestar que las operaciones en otros países son necesarias en el mundo empresarial, "primero para sobrevivir y luego para triunfar. Hay que entrar en otros mercados y no focalizarse en áreas concretas".
Jesús Fernández, director del Área de Marketing de Empresas de Caja Madrid, destacó el dinamismo exterior de Euskadi, "que es la quinta comunidad autónoma por volumen de exportaciones", con Europa como cliente principal.
Por su parte, Ignacio Martín, consejero delegado de CIE Automotive (68 plantas y 12.500 trabajadores en tres continentes), explicó su estrategia "para crecer sin dinero", en referencia a la caída de la facturación por la crisis, lo que lastra la dinámica de cualquier grupo industrial, siempre atado por los costes fijos. Pese a la negativa coyuntura económica desde septiembre de 2008, CIE ha mantenido su estrategia de internacionalización mediante alianzas con socios locales, por ejemplo en Rusia. También ha recurrido a las aportaciones de inversores financieros, "que no te dejan abandonado", y a los mercados de valores. Estudia, además, su salida a cotización en la Bolsa de São Paulo. Con estas fórmulas, el grupo con sede social en Bilbao se mantiene en el puesto 75 entre los mayores fabricantes de componentes de automoción del mundo.
A la hora de internacionalizar, Gandásegui, al frente de un grupo con 3.500 empleados y centros fuera en América y Europa del Este, tiene constantemente en la cabeza los ratios de costes laborales. "En el País Vasco llegan a los 60 euros por hora, frente a los 36 euros de Andalucía, los 34 de Brasil y los 25 de México". También valoró el número de horas trabajadas al año. En el país azteca superan los 2.000 horas por empleado, "mientras ese nivel es más difícil de alcanzar en Euskadi", afirmó en el encuentro de San Sebastián.
La cultura de la internacionalización "tiene que calar hondo" en todas las personas que trabajan en una empresa, según Javier Ormazabal, presidente del grupo energético Ormazabal (2.000 trabajadores y ventas de 400 millones). Esta empresa familiar, fundada por su padre hace 43 años, "está aprendiendo ahora a recoger los beneficios que nos ofrecen" sus plantas en China, Francia y Alemania. La crisis ha costado 600 millones y 8.435 empleos a Guipúzcoa, a juicio de Pedro Esnaola, presidente de la Cámara de Comercio del territorio histórico. Esnaola advirtió que Europa "es un mercado doméstico, hay que tener claro que internacionalizar no es exportar". La institución que gestiona quiere apoyar los planes exteriores de las pymes, que son mayoría en el tejido empresarial de Euskadi (en Guipúzcoa, el 90% tienen menos de diez trabajadores). Santiago Allué, director de Organismos Multilaterales y Comercio Exterior de Caja Madrid, incidió, por su parte, en que las compañías tienen que estar atentas a las líneas de crédito a la exportación que a veces están abiertas para determinados mercados, ahora para Angola, por ejemplo.
José Ramón Díez Guijarro, director del Servicio de Estudios de Caja Madrid, dejó claro en las jornadas de la capital donostiarra que los países emergentes siguen ganando protagonismo en la economía mundial. En 1990 aportaban el 36% del crecimiento del planeta y en 2009 llegaron al 46% (concentran ya el 22% del consumo global), de acuerdo con los datos de Díez Guijarro. Y no pierden el ritmo. El PIB de China seguirá aumentando a un 10% anual y el de India al 8,5%, frente a la media del 2% de los países desarrollados.
Goldman Sachs ha vaticinado que en 2030 el país comunista desbancará a Estados Unidos como economía líder mundial, mientras que India subirá al tercer puesto. Para España, Díez Guijarro prevé un retroceso del 0,3% del PIB en 2010 y una subida del 0,4% para 2011. El próximo ejercicio sólo enganchará ritmos de creación de empleo a partir de la segunda parte del año.
Con este escenario, la internacionalización vuelve a reivindicarse como fundamental, reiteró Francisco J. Sánchez Vellvé, director de Negocio de Empresas de Caja Madrid. Euskadi cerró el primer semestre con un crecimiento de las exportaciones del 21%, declaró Sánchez Vellvé en las jornadas de San Sebastián, ciudad que ha pasado el primer corte eliminatorio para aspirar a la capitalidad europea en 2016, como recordó Enrique Ramos, concejal de Economía y Fomento del consistorio donostiarra.
Bernabé Unda, consejero de Industria, Innovación, Comercio y Turismo del Gobierno vasco, clausuró el encuentro, recién llegado de un viaje por Estados Unidos y China. Ha venido "entusiasmado por las oportunidades" del país comunista y por las "fortalezas" de la industria vasca hay 160 compañías con negocios allí; de ellas, 68 con fábricas, 51 con delegaciones comerciales y el resto con actividades del sector servicios.
El viaje estuvo liderado por el lehendakari Patxi López, acompañado por un centenar de empresarios. Unda resaltó la importancia de arropar desde el Ejecutivo de Vitoria a los hombres de negocios con operaciones en marcha en China, "y donde sus competidores siembren dudas sobre la viabilidad de la economía española y de todo lo relacionado con ella. Que te acompañe un gobierno elimina de golpe estas difamaciones". El consejero de Industria insistió en que "hay que estar fuera para crear empleo y riqueza aquí". Y advirtió que "los trenes no pasan dos veces", en relación con las posibilidades de negocio en los países emergentes.
Javier María Pombar Castaño, director del Centro de Empresas de Caja Madrid en San Sebastián, recordó que la entidad abrió su primera oficina en esta ciudad en 1994. El Centro de Empresas está en marcha desde 2002. En los ocho primeros meses de este ejercicio, la caja ha rondado los 700 millones en financiación y avales a compañías de Euskadi, un 9,6% más que en el mismo periodo del año anterior. De esa cantidad, 298 millones corresponden a inversión crediticia y 393 millones a avales.
Implantación en otros países con vocación de permanencia
La cooperativa Irizar, dedicada al carrozado de autocares y autobuses, fue uno de los primeros que entendió la importancia de la internacionalización.Desde su sede en Ormaiztegi (Guipúzcoa) dirige una multinacional con fábricas en China, Marruecos, Brasil, Sudáfrica, México e India. En total, 3.000 trabajadores y una cifra de facturación prevista para este año de 400 millones.Juan Carlos Cantalapiedra, director de nuevos negocios de Irizar, resaltó que todos esos proyectos se abordaron con "vocación de permanencia", aguantando los reveses y liderando las inversiones, pese a contar con el apoyo inicial de promotores locales.Otra cooperativa guipuzcoana, Ampo, también inició hace décadas su internacionalización. Con más de 500 trabajadores y unas ventas de 160 millones en 2009, Iban Iriondo, su coordinador general, destaca "la implicación de las personas" que integran este grupo de Idiazabal. Ante una caída de la facturación del 15% el año pasado decidieron rebajarse un 10% el sueldo para mantener la plantilla sin bajas.Javier Roquero, director general de Salto Systems, que fabrica sistemas de control de accesos, destacó que entre los 160 trabajadores suman 12 nacionalidades. "Todos tenemos un nivel medio-alto de inglés en el que realizan las comunicaciones internas y muchos dominan un segundo idioma". La innovación es otra clave en esta compañía de Oiartzun (Guipúzcoa). "El 90% de nuestra ventas 35 millones previstos en 2010 proceden de productos que no existían hace tres años".José Luis Azkue, gerente de Lantik, firma dedicada a estructuras para la construcción, afirmó que "no existen tiempos fáciles" para los negocios y que en el extranjero "siempre hay que tener más paciencia y perseverancia. Nuestro futuro está ahí fuera".Igor Unanue, director gerente de S21sec, centrada en la seguridad digital, aseguró que los ataques globales contra los sistemas informáticos facilitaron la internacionalización de la compañía, fundada en 2000.