Alessandro Profumo dimite como consejero delegado de Unicredit
El consejero delegado de Unicredit, Alessandro Profumo, dimitió ayer de su cargo, según informó la prensa italiana, a través de una carta a la junta directiva de la entidad. El mayor banco de Italia convocó una reunión extraordinaria del consejo de administración en la que se esperaba la retirada del directivo debido al deterioro de su relación con el resto de la dirección de la entidad.
Profumo, que lleva 15 años de consejero de delegado de Unicredit, ha sido uno de los banqueros más influyentes e importantes de Europa. Sin embargo, accionistas y miembros del consejo han incrementado la presión sobre su liderazgo desde la crisis financiera y "sólo por poco pudo aferrarse a su puesto en 2009 y el año anterior", afirman fuentes conocedoras de la situación.
Las relaciones de Profumo con el consejo de administración, presidido por Dieter Rampl, se han deteriorado aún más en los últimos días. Las fuentes apuntan que Rampl podría ocupar los puestos de presidente y consejero delegado hasta que se encuentre un sustituto a Profumo, algo que podría ocurrir antes de las Navidades.
Recientemente, Profumo se ha enfrentado a la criticas de los políticos italianos y los accionistas locales por permitir que Libia se haya hecho con un 7,5% del banco. El ejecutivo tomó esta decisión después de que Cariverano, un accionista italiano, no acudiera a una ampliación de capital.
El directivo ha dirigido una expansiva política al mando de Unicredit. Destaca la fusión con HypoVereinsbank (HvB) y la entrada en los mercados de Este de Europa.
Emilio Botín, presidente de Santander, y Francisco González, de BBVA, son los únicos banqueros en sus cargos desde hace más de 10 años.
Italia investiga a Banco Vaticano
El presidente de Banco Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi, está siendo investigado por la Fiscalía de Roma por supuesta violación de la Ley sobre Prevención de Blanqueo de Dinero. El directivo fue presidente de Santander Consumer Bank en Italia y está próximo al Opus Dei. La juez ha decretado la incautación preventiva de 23 millones de euros depositados en el Banco Credito Artigiano a nombre del Instituto para las Obras de la Religión (conocido como Banco Vaticano). La Santa Sede expresó ayer su "perplejidad" por la investigación.