El Gobierno ratifica la congelación de los salarios públicos para ahorrar 2.400 millones en 2011
El Gobierno ha ratificado la congelación de los salarios de los empleados públicos y de la tasa de reposición en el 10% para ahorrar 2.400 millones de euros en 2011, que aliviarán a la Administración General del Estado un gasto que asciende a 5.600 millones junto a la rebaja de un 5% de media que se aplica este año.
Así lo ha anunciado la secretaria de Estado para la Función Pública, Consuelo Rumí, tras presentar a los sindicatos el anteproyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para el próximo año en el seno de la Mesa General de Negociación de las administraciones públicas.
Según Rumí, la "voluntad" del Ejecutivo persigue "consolidar" la lucha contra el déficit público, dentro del contexto de control del gasto impuesto desde Bruselas. "No sería responsable un volumen de empleo mayor durante la crisis", ha asegurado la secretaria de Estado para justificar que sólo una de cada diez vacantes sean reemplazadas en la Administración.
Además, el Gobierno ha anunciado que a partir de 2011 reconocerá como accidente de trabajo aquellos que acontezcan en el trayecto hacia el lugar donde se desempeña el mismo, al tiempo que bonificará los partos con el reconocimiento para la cuantía de las pensiones de 112 días por primogénito y 14 días por el segundo hijo.
Sin embargo, los sindicatos han acusado a la Administración Central de "acostumbrase a saltarse la ley", en palabras del secretario general de la federación de servicios a la ciudadanía FSC-CC.OO., Enrique Fossoul.
Para Fossoul, la ratificación de la congelación de los salarios, ya decidida por el Gobierno con el decreto de mayo para acelerar la reducción del déficit, añade "más razones" para ir a la huelga general del próximo 29 de septiembre.
Giro de 180 grados
Desde UGT, la secretaria de Acción Sindical de UGT-FSP, María del Carmen Barrera, ha advertido al Ejecutivo de que "sin rectificación" de la política económica, la central liderada por Cándido Méndez no está dispuesta a negociar "absolutamente nada". Así, se ha referido a la huelga general como "oportunidad" para que el Gobierno "reaccione y rectifique". "Sin un giro de 180 grados, no negociaremos nada", ha reiterado.
Por su parte, el secretario de Formación de CSIF, Miguel Borra, ha reafirmado la "parálisis" en las negociaciones con la Función Pública, pues "desde hace meses" no se ha producido ningún tipo de reunión entre las partes.