La subasta de letras de Irlanda rebaja la presión sobre la deuda periférica
El éxito de la subasta de letras de Irlanda permitió ayer la caída de los diferenciales de Portugal, Grecia e Irlanda. La prima de riesgo irlandesa registró el mayor recorte desde finales de julio.
La subasta de letras realizada ayer por Irlanda funcionó como un bálsamo sobre la prima de riesgo de la deuda pública del país y de la deuda portuguesa y griega, las más presionadas en los últimos días por las renovadas dudas sobre los bonos soberanos de los países de la Europa periférica. Así, el diferencial de la deuda irlandesa se suavizó ayer a los 352 puntos básicos, desde el máximo histórico de la víspera, en los 371,27.
La reducción, de 19,2 puntos básicos, fue la más notable desde el pasado 27 de julio, en que la prima de riesgo descendió en 20,24 puntos, justo después de la publicación de los test de estrés a la banca europea. La prima de riesgo de Portugal también se suavizó desde máximos hasta los 340 puntos básicos y la de Grecia registró un descenso hasta los 938 puntos básicos. De hecho, el mercado de deuda ofreció ayer una imagen opuesta a la de los últimos días, con descensos en la rentabilidad del bono a diez años de Grecia, Portugal e Irlanda, frente a los incrementos del resto de activos soberanos europeos, incluida la deuda española. Así, la rentabilidad del bono español a diez años registró ayer una ligera subida, al 4,054%, y la prima de riesgo quedó en los 171,7 puntos básicos.
Un día después de la subasta de bonos de Portugal, la subasta de ayer de Irlanda fue por tanto el detonante para una ligera corrección desde los activos de deuda de mayor calidad. Irlanda emitió ayer letras a cinco y siete meses por un importe conjunto de 400 millones de euros, el mínimo previsto en una banda que contemplaba un objetivo máximo de 600 millones de euros, aunque con una fuerte demanda. Colocó 150 millones en letras a cinco meses con una rentabilidad del 1,925%, por debajo del 1,978% de la subasta anterior, y con una demanda que superó en 9,4 veces la oferta. Y emitió otros 250 millones de euros de letras a siete meses al 2,19%, desde el 2,348%, con una demanda que rebasó en 5,4 veces la oferta.
La deuda de mayor calidad registró una ligera corrección y el 'bund' subió al 2,33%