Gullón y su ex director se disputan de nuevo el control del terreno de la planta galletera
Los herederos de Gullón y el ex director general de la empresa galletera van encadenando disputas. La última a causa de la compraventa de los terrenos donde se ubica parte de las instalaciones palentinas. Martínez Gabaldón emplazó ayer a la dirección de la compañía para formalizar la venta, pero ésta se suspendió tras el retraso del ex directivo por "motivos personales".
La pugna por el control de Gullón va alejándose día a día de llegar a un acuerdo amistoso. Los herederos de la empresa galletera y su ex director general protagonizaron ayer una nueva disputa, esta vez a causa de los terrenos donde se ubica la fábrica palentina.
El ex director general de Gullón, Juan Miguel Martínez Gabaldón, emplazó la semana pasada -mediante un burofax- al presidente del consejo de administración, Rubén Gullón, para cerrar la venta de los terrenos en una notaría de Aguilar de Campoo, la localidad donde tiene su sede la empresa. Una operación que lleva años en el aire.
No en vano, la propiedad de los terrenos es uno de los motivos que han llevado a Gullón y a Martínez Gabaldón a los tribunales y que originaron el despido del ex director general del grupo. Una marcha forzada que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha considerado improcedente.
Martínez Gabaldón explicaba en el burofax remitido a la empresa que en 2009 dio su consentimiento a Gullón para que la compañía ejercitara en cualquier momento la opción de compra que mantenía por los terrenos, sobre los que existía un contrato de arrendamiento. En él también manifiesta "su mejor disposición para vender y transmitir la propiedad de la finca a Galletas Gullón en el momento que ésta deseara" y a pesar de que el actual consejo de administración "ha cuestionado la validez del contrato de arrendamiento". El ex directivo también señala que los tribunales "se han pronunciado" a favor de su legalidad.
Así, en función de este acuerdo, emplazaba a Gullón a cerrar ayer la venta por un importe de 3,8 millones, a los que se sumarían los impuestos.
Sin embargo, Martínez Gabaldón se presentó en la notaría horas después de lo acordado. Un retraso que atribuyó a motivos personales y que originó otro motivo de discordia. Los representantes de Gullón se negaron a cerrar la transacción a causa de la demora, a pesar que podría haber sido un paso para acercar posiciones entre ambos bandos. Mientras, fuentes próximas a Martínez Gabaldón aseguraban ayer que éste mantiene su disposición a vender los disputados terrenos si se marca una nueva fecha.
Suspende su junta por no cumplir los requisitos legales
La compraventa de los terrenos queda al margen de la junta que Gullón tenía previsto celebrar mañana, que fue convocada por orden judicial. En ella, la ex presidenta y madre de los herederos de Gullón, María Teresa Rodríguez, pensaba disolver el consejo de administración y convertirse en administradora única. La ex presidenta posee el 55,2% de la sociedad y cuenta con el respaldo del 16% propiedad de Juan Miguel Martínez Gabaldón, un porcentaje que le garantiza sacar adelante sus propuestas. La junta también tenía que aprobar la modificación de casi una veintena de artículos de los estatutos sociales de Gullón. El grupo ya adelantó la pasada semana que estudiaba la suspensión de la junta ya que, a juicio de su consejo, la convocatoria no cumple los "requisitos legales", aunque aún no ha desvelado de qué formalismos se trata.
La cifra
3,89 millones de euros. Es el precio de compraventa que han acordado Gullón y su ex director general para cerrar la venta de los terrenos.