Cullera Holiday, primer hotel de capital chino de Europa
Pese a tener ocupado sólo el 40% los días laborables de agosto, sus dueños apuestan por inventar fórmulas para llenarlo todo el año
Llegaron a Cullera, un turístico pueblo de Valencia, hace unos 30 años y abrieron el primer restaurante chino en esta localidad. Y ahora presumen de que en marzo de este año inauguraron Cullera Holiday, el primer hotel de Europa controlado al 100% por una familia china. Yi Cao, (Carolina en España), es la directora e hija del dueño de este hotel de cuatro estrellas, uno de pocos de esta categoría de la zona. Tiene 27 años y lleva 15 en el país. Su español es perfecto, "e incluso mi valenciano", afirma orgullosa.
"Llegue aquí con 12 años. Mis padres ya llevaban mucho tiempo trabajando en Cullera. Pero a mí me cuidó mi abuela en China hasta que pude venir a España. Y lo primero que hice fue aprender español y valenciano. Parece que se fían más de ti cuando comprueban que hablas su idioma", afirma.
Asegura que su padre es un gran emprendedor. "No es como el resto de nuestros compatriotas que llegan y abren el mismo negocio, tiendas de comestibles, de ropa, bazares. Ahora toca peluquería, pues todos abren peluquerías. Mi padre no. Abrió el primer restaurante chino de Cullera, y ha llegado a tener diez en la zona", indica la directora del hotel. La familia ha tenido otros negocios, pero desde hace diez años baraja la idea de regentar un hotel de gama medio-alta en la ciudad, ya que en este enclave hay muchos apartamentos, pero muy pocos establecimientos hoteleros.
La familia ha invertido 20 millones de euros en la puesta en marcha de este negocio
Cao indica que, cuando se puso a la venta la parcela donde se ubica el hotel, situada a 100 metros de la playa, su familia decidió aprovechar la oportunidad. "La condición era que el comprador tenía que construir un hotel de cuatro estrellas", dice. La familia consideró que sería un negocio rentable, ya que Cullera llega a tener en verano una población de hasta 300.000 habitantes y en ocasiones no hay sitio para todos.
La construcción del hotel se inició en noviembre de 2004, cuando las previsiones sobre el crecimiento de la economía española eran mucho más halagüeñas. Desde entonces dice que ha trabajado 18 horas diarias (incluidos los domingos). "He tenido que compaginar mis estudios de Economía en la universidad con la realización de este proyecto. Soy la mayor de tres hermanos y he sido la que ha estado más involucrada en él", declara y añade que antes de llegar a este puesto ha tenido "que fregar muchos platos".
Cullera Holiday, en cuya construcción la familia ha invertido 20 millones de euros, cuenta con unos 16.000 metros cuadrados, 126 habitaciones con capacidad para 250 personas. En él trabajan 28 empleados en plantilla. Cao afirma que el plan inicial de viabilidad estipulaba que en tres años sería rentable el hotel. "Hoy pensamos que serán necesarios más de ocho años y para ello tendremos que inventarnos fórmulas, como atraer a los chinos que comienzan a hacer turismo en España o los que vienen por negocios".
Esfuerzo
Insiste en que la recesión económica ha impactado sus actividades. A pesar de que en fin de semana hay un 100% de ocupación, en agosto sólo el 40% de las camas está ocupado entre semana. "Todos los negocios tienen riesgo. No podemos arrepentirnos. Hay que asumir la situación. Si cae un negocio se crea otro o se intenta levantar el que ha fracasado. Así es nuestra cultura, pero no puedes amargarte", declara Carolina con una sonrisa.