El duelo entre Madrid y Barça se juega en los banquillos
La llegada de José Mourinho al Real Madrid proyecta la eterna rivalidad entre el conjunto blanco y el equipo de Guardiola más allá del terreno de juego
La nueva temporada levanta el telón este fin de semana y Real Madrid y F.C. Barcelona volverán a disputarse la hegemonía del fútbol español en un campeonato marcado por el duopolio que los dos grandes ejercen en la Liga. La irrupción de la crisis económica en los clubes españoles no ha hecho sino ampliar aún más las diferencias existentes entre ellos y el resto de equipos nacionales.
El F.C. Barcelona, vigente campeón, se sitúa de nuevo como el rival a batir, tal y como reflejan las principales casas de apuestas. Esa condición de favorito se ha visto reforzada con su contundente victoria frente al Sevilla en la vuelta de la Supercopa de España, que le ha valido al conjunto culé su primer título del nuevo curso. Lo que se suma a la masiva y determinante presencia de futbolistas azulgranas en la selección española campeona del mundo en Sudáfrica, hace menos de dos meses.
Para hacer frente al coral conjunto blaugrana, Florentino Pérez, al mando de la nave blanca, ha dado un giro a su habitual política de fichajes. Forzado por las circunstancias deportivas y económicas, como el fin de la Ley Beckham, ha puesto el acento en la dirección técnica, contratando al entrenadormás mediático y prestigioso del panorama futbolístico, JoséMourinho, y obviando los fichajes de nuevos galácticos para el césped. La llegada del portugués a las filas blancas extiende la rivalidad entre madridistas y catalanes a los banquillos. El milimétrico trabajo táctico del técnico luso, azote de los culés en los últimos años, pondrá a prueba el fútbol de toque y cantera del equipo de Guardiola.
La crisis ha llegado a los clubes, que comparten una deuda de 3.526 millones y han reducido el gasto
Todo hace indicar que el fenómeno del modelo bipartidista en la lucha por el título que se ha asentado en las últimas campañas volverá a repetirse. Si la diferencia entremerengues y culés con el resto de equipos resultó realmente llamativa el pasado año, con el tercer clasificado a casi 30 puntos del campeón, la crisis económica invita a pensar que las diferencias aún pueden ser mayores esta temporada.
Entre ambos conjuntos se han repartido 22 de las últimas 26 Ligas en juego, una situación que recuerda en exceso al campeonato escocés, donde Celtic y Rangers han aglutinado los últimos 24 campeonatos. "Ante este hecho, la Liga corre el serio riesgo de dejar de ser un torneo competitivo y, por lo tanto, que pierda interés para el mercado exterior", argumenta José María Gay de Liébana, profesor de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad de Barcelona.
La realidad económica se impone y los grandes desembolsos en jugadores de temporadas precedentes han dado paso a una palpable contención del gasto entre los clubes. A la espera de que el plazo de fichajes concluya el próximo día 31, las contrataciones no alcanzan los 250 millones. Unos números que no se daban desde el verano de 2003 y que suponen cerca de un 50 por ciento menos que en 2009, por debajo incluso del desembolso que sólo el conjunto que preside Florentino Pérez llevó a cabo el pasado año.
Más de la mitad de esas inversiones corresponden a Madrid y Barcelona, que continúan ampliando la brecha con el conjunto de equipos españoles gracias a su capacidad para generar ingresos, 401,3 y 366,4 millones de euros respectivamente, según el último estudio anual de Deloitte, y su posición dominante en los derechos televisivos. Estas cifras suponen asimismomás de la mitad del total de ingresos del resto de clubes de la Liga, que asciende en conjunto a 1.454,9 millones de euros.
Pese a que los dos colosos han reducido sensiblemente sus inversiones, el Real Madrid puede presumir, un año más, de ser el principal animador del mercado, tras gastarse casi 90 millones en Canales, Pedro León, Khedira, Di María, ízil y Carvalho, que intentarán llenar el hueco dejado por dosmitos del madridismo, Raúl y Guti. Por su parte, el Barça ha realizado el fichaje más caro de las grandes ligas europeas, al contratar a David Villa por 40 millones, además de Adriano procedente del Sevilla y la inminente llegada de Mascherano.
Por detrás de Barça y Madrid las posibilidades se abren. El Valencia, envuelto en graves problemas económicos, se ha visto obligado a reinventarse tras las salidas 'obligadas' de Villa y Silva, si bien su vuelta a la Champions puede ser un balón de oxígeno para sus delicadas arcas. El Atlético, el Sevilla, el Villarreal y el Athletic de Bilbao han conseguido retener a todas sus estrellas y se disputarán las plazas europeas. El conjunto rojiblanco parece haber encontrado la estabilidad con Quique Flores en el banquillo y el Kun y Forlán en la delantera. Además, las llegadas de los defensas Godín y Filipe Luis han reforzado la línea más debilitada del equipo.
El conjunto sevillista ha sufrido un duro revés al no obtener el pase a la Champions en la ronda previa, que se traduce en una pérdida de unos 20 millones, un 20 por cierto del presupuesto de este año. Villarreal y Athletic refuerzan su apuesta por la cantera, los bilbaínos evitando salidas traumáticas y el "submarino" apostando por los chicos del filial.
A ellos se sumarán el Getafe de Míchel, un Mallorca al borde de la quiebra o el Málaga del jeque qatarí Al-Thani en la pugna por la Europa League. Deportivo, Espanyol, Osasuna, Almería, Racing, Zaragoza y Sporting apuestan por la continuidad de sus técnicos en la zona media de la tabla. Real Sociedad, Hércules y Levante regresan a Primera con la vista puesta en la salvación.
Las dificultades de los clubes se han acrecentado, "la falta de liquidez hace mella y urge un cambio de modelo y un plan de viabilidad para asegurar el futuro de la Liga", asegura Gay de Liébana, pero este fin de semana, pese a las dificultades, las ilusiones se renuevan.