Codere tendrá que pagar a William Hill en caso de vender la filial de apuestas
Codere tendrá que hacer cuentas con su ex socio William Hill si decide vender su filial de apuestas deportivas. En enero pagó un euro a la empresa británica por el 50% de la joint venture. Si Codere se desprende de esta participación, tendrá que pagar la diferencia entre su precio de compra y el importe que lograra con su venta.
A principios de año Codere pagó un euro a su entonces socio William Hill para hacerse con el control de su 50% en la joint venture de apuestas deportivas: Victoria. Ambas compañías alegaban entonces que se trataba de un precio simbólico que beneficiaba a ambas.
Por un lado, la venta permitía a la empresa británica centrarse en el negocio online, donde veía mayores posibilidades de crecimiento. Por otro, la sociedad controlada por la familia Martínez Sampedro se convertía en el único accionista de una sociedad joven, ya que las apuestas deportivas aún son una actividad a la espera de ser desarrollada en el conjunto de España. Pero el acuerdo entre ambas compañías no era tan sencillo como a simple vista podía parecer. Codere reconoce en la ampliación de su auditoría, remitida a la CNMV, que si en los dos próximos años vende las acciones de Victoria adquiridas a William Hill tendrá que volver a hacer cuentas con el grupo británico. En concreto, siempre que el importe fuese superior al euro abonado a William Hill tendrá que pagar a éste la diferencia entre el futuro e hipotético precio de venta y el euro que acordó en enero.
La posibilidad de encontrar un socio que apoye a Codere en su negocio de apuestas no es ni mucho menos remota. La empresa madrileña ya ha reconocido en varias ocasiones su predisposición a dar entrada en el capital a algún inversor.
El operador de bingos y casinos también explica a la CNMV que el valor razonable que otorgaba a la filial de apuestas el pasado enero ascendía a 33 millones de euros. Una valoración que distaba de la abonada a William Hill por su 50% del accionariado. Por ese motivo, encargó a un experto independiente que valorase este negocio. En función de la evolución durante el primer semestre de 2010, y las "situaciones que se estiman más probables en el futuro", el experto situaba el valor razonable entre 22,6 y 24,7 millones de euros.
La compañía justifica esta rebaja a que la valoración del experto tuvo en cuenta la evolución en 2010. Según los últimos datos comunicados por la empresa a la CNMV -correspondientes al primer trimestre-, registró unos ingresos de explotación de 0,8 millones de euros.
La cifra
26,4 millones de euros prevé ingresar Codere en 2014 a través de su filial de apuestas. De ser así, multiplicaría por cuatro sus ventas de 2009.
La regulación de juego autonómica pisa el acelerador
Uno de los problemas que han retrasado el crecimiento del negocio de apuestas deportivas ha sido la ausencia de regulación autonómica. Pero Codere empieza a ser optimista y cree que en los próximos meses varias comunidades regularán el sector de las apuestas (también las que se realizan a través de internet). De ser así, su división Victoria podrá dar el salto a nuevos territorios. Actualmente, la filial sólo opera en Madrid y en el País Vasco, las únicas dos comunidades que han legislado el negocio de las apuestas. Codere apunta que recientemente Ceuta ya ha aprobado su propia reglamentación y Navarra va a seguir el mismo camino. Además, señala que Valencia, Cataluña, Aragón, La Rioja y, en menor medida, Murcia "se encuentran avanzadas en el proceso de aprobación de la regulación específica".