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Mercados

Los analistas prevén que la emisión de deuda pública siga abaratándose

Los test de estrés de la banca han devuelto la confianza de los mercados sobre la deuda española. Al abaratamiento de los tipos de interés por la emisión de letras a corto plazo le acompaña la progresiva reducción de distancia entre el bono español y el alemán a 10 años. Aunque los analistas consideran que ambas tendencias seguirán consolidándose, descartan que la prima de riesgo recupere los niveles anteriores a la crisis.

El mazazo que la crisis asestó a España no tardó en convertir el superávit del que gozaban sus cuentas en 2007 (1,9%) en uno de los mayores déficit de la Unión Europea. Desde aquel año, el Estado se ha visto obligado a multiplicar por dos su endeudamiento para tratar de paliar unos números rojos que rondan el 11% del PIB y que debe rebajar al 3% en 2013. Una jugada que se reveló excepcionalmente cara para el Tesoro tras el terremoto que la caída de Grecia despertó en la confianza de los mercados. Ahora, tras meses de gran volatilidad, comienzan a disiparse las dudas que los inversores albergaban sobre las emisiones soberanas. Una tendencia positiva que, según los expertos, se mantendrá en los próximos meses.

"Esta situación debería continuar. Se estaba penalizando demasiado a España y como se ha demostrado la situación no era tan mala", expone María Luisa Álvarez, analista de Ahorro Corporación. "La situación vuelve a ser muy buena. Todas emisiones que se han subastado se han colocado sin problema. Hay mucha demanda y los intereses han caído". Las palabras de la experta hacen referencia a la dos últimas emisiones del Tesoro, en las que la nueva coyuntura ha ayudado a reducir los intereses que debe pagar el Estado por ellas.

En concreto, las letras a seis meses iniciaron el año bajo un tipo marginal del 0,483, que se disparó hasta el 1,65 en junio. Una dinámica que se revertió el martes cuando el tipo bajó al 1,17%. "Llegarán a caer por debajo del 1%, si bien es difícil decir si se situarán en el 0,8% o el 0,9%", apunta Guillermo Monroy, director de trading de Banco Sabadell. Lo mismo ocurre con las emisiones a 18 meses, que en febrero tenían intereses del 1,2% y en junio rozaron el 3%. Este mes se rebajaron hasta el 2,4%. Por su parte, el diferencial entre el bono a 10 años de España y Alemania rondaba ayer los 147 puntos básicos (11 más que el martes), tras llegar a 221 hace unas semanas.

¿Por qué esta mejoría? Los expertos coinciden aquí dos factores. De un lado los mencionados exámenes realizados a la banca. "El Banco de España es la única institución con credibilidad ante los mercados y al día siguiente de que anunciara que publicaría los resultados de los test, todo cambió". De otra parte, prosigue el analista de Sabadell, "había mucho miedo por los vencimientos de deuda pública que estaban pendientes en julio. Cuando se les hizo frente se demostró que había de sobra para responder". Un factor decisivo teniendo en cuenta que el Tesoro ha hecho frente ya al grueso de las amortizaciones del año.

Así, los analistas señalan que mientras "el Gobierno no pierda tensión y acometa las reformas estructurales que necesita el país", la prima de riesgo seguirá descendiendo. Destacan, eso sí, que ésta nunca volverá a los niveles anteriores a la crisis, como a comienzos de 2008 cuando se situó en poco más de ocho puntos básicos. "No todos los países tienen el saneamiento económico de Alemania, pero aún así estamos mejor que otros".

La buena coyuntura económica se vio apuntalada ayer, además, con el anuncio del secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, de que el déficit se ha rebajado un 24,7% en lo que va de año. Un resultado que Citi considera "muy positivo" y un "cambio significativo" para España "que incrementa sus posibilidades de cumplir su objetivo de inflación" del 9,3% para finales de año.

El Tesoro descarta aumentar las subastas que tiene previstas

Pese a que el coste de colocar deuda pública se ha visto abaratado por la buena coyuntura económica, fuentes del Tesoro aseguran que nadie se plantea elevar las emisiones que está previsto subastar. "Se rumoreó con eso cuando se ponía en duda que pudiéramos hacer frente a la deuda pendiente. Ahora está claro que no necesitamos hacerlo", revelan. Así lo descarta también el director de trading del Sabadell, Enrique Monroy. "Si no hubo nervios en los momentos complicados, no creo que los haya ahora. Pienso que el Tesoro mantendrá sus cálculos y necesidades de financiación. Quiénes si aprovecharán ahora serán los bancos. En septiembre habrá un aluvión de emisiones", sostiene.

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