S&P mantiene la perspectiva negativa a Reino Unido por el deterioro fiscal

La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's (S&P) confirmó ayer la nota de la deuda a largo plazo y corto plazo del Reino Unido, aunque mantuvo la perspectiva negativa, lo que deja abierta la posibilidad a una rebaja de la nota a medio plazo ante las dimensiones del desafío fiscal al que se enfrenta el país.

"El sustancial deterioro estructural de las finanzas públicas entre 2007 y 2009 ha llevado a la deuda pública al nivel más alto entre los países con la máxima calificación (triple A)", subraya el informe de S&P, quién no obstante alaba el presupuesto de emergencia presentado a finales de junio por el Ejecutivo de Cameron. En el mismo se prevé un recorte anual del gasto de 35.000 millones de euros para atajar el déficit, que se elevó al 9,5% del PIB en 2009.

Ante las advertencias de posibles sanciones por parte de la Comisión Europea a los países de la UE que no cumplan el pacto de Estabilidad, el ministro de Economía británico, George Osborne, avisó ayer que no aceptará que se apliquen sanciones financieras a Reino Unido por déficit excesivo porque su país no forma parte de la eurozona. "La UE podrá revisar las cuentas de los Estados miembros antes de su aprobación parlamentaria para detectar posibles desviaciones, pero el presupuesto británico se presentará en primer lugar al parlamento británico", recalcó.