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Tribuna
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Acariciar la nube

Los esfuerzos de los últimos años por modernizar la Administración en España no tienen nada que envidiar a nuestros vecinos europeos. Así lo perciben los ciudadanos al ver el creciente número de trámites que podemos realizar a través de internet y serán los últimos avances tecnológicos los que nos permitirán ir más allá.

Una de las tecnologías que se presenta como clave para la Administración electrónica es el cloud computing. Se trata de un modelo de externalización de los recursos TI que facilita la movilidad, el acceso y el intercambio de información a través de la red, así como una gestión más eficiente de las TIC. Con el fin de acercar este concepto a las grandes organizaciones y la Administración, los proveedores de comunicaciones y TI lo han extendido para cubrir no sólo los entornos de trabajo sino también las plataformas informáticas sobre las que las aplicaciones de negocio se alojan. Al contar con el control de toda la plataforma, se garantiza una disponibilidad permanente de las aplicaciones y servicios así como las máximas garantías de seguridad.

Uno de los requerimientos del Esquema Nacional de Interoperabilidad en el ámbito de la Administración electrónica especifica, tanto las sedes electrónicas a las que acceden los ciudadanos como los sistemas con los que interactúan estos portales, es contar con disponibilidad permanente, algo que se puede conseguir mediante la externalización de los servidores y sistemas informáticos.

Para la Administración, este modelo supone disponer de una plataforma cloud computing alojada en el data centre del proveedor, con una ubicación precisa y definida y personal cualificado que se encarga de garantizar la seguridad. De esta forma, los organismos pueden tener plena confianza de que existe una gestión tecnológica especializada, así como unas políticas alineadas con los objetivos de reducción de emisiones de carbono.

Las Administraciones están a un paso de adoptar estas tecnologías gracias a los cambios en la legislación comunitaria que unifican las leyes de protección de datos de todos los Estados miembros en aras de ofrecer servicios mucho más avanzados, de aumentar la productividad y de conciliar mejor la vida laboral con la personal.

Una encuesta de la consultora Portio, a finales de 2009, ponía de manifiesto que entre el número de directores que conoce cloud computing, el 77% ya lo había implementado o estaba considerando su implementación. Los beneficios son significativos y las Administraciones no tardarán en aprovecharlos como próximo paso en un proceso de modernización y de gestión del cambio que ya es referente a nivel europeo.

Ángel Rojo. Director general de Colt España

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