Las modas adolescentes se renuevan por el verano
El final del colegio trae la tercera película de 'Crepúsculo' y la gira musical de 'Patito Feo'
Puede que Hannah Montana se haya reencarnado en la provocativa Miley Cyrus, buscando seducir a un público más adulto que el que sigue sus aventuras juveniles, pero la maquinaria de la industria del entretenimiento no la va a echar de menos. Los adolescentes son uno de los públicos consumidores más atractivos y los fenómenos de fans se suceden. Esta semana, con el colegio ya acabado, llegaron con toda fuerza los nuevos lanzamientos de dos de los productos con más seguidoras del momento: la tercera película de la serie Crepúsculo, Eclipse y la gira española de conciertos de la serie Patito Feo.
No tienen mucho en común; mientras la primera atrae a las chicas con su ambiente gótico y sus héroes oscuros, la segunda es una telenovela musical en la que grupos de adolescentes compiten por lograr triunfos en el escenario. Sin embargo, son negocios multimillonarios.
José Vila, director general de Disney España, que cuenta con un canal especializado en el público adolescente líder en el segmento -Disney Channel-, explica las claves del éxito en este grupo de edad. "Hay tres ejes básicos: historias universales que sean válidas en cualquier lugar del mundo, personajes con los que los chicos se puedan identificar, y la presencia de música y coreografías". Estos elementos están presentes tanto en Patito Feo como en Hannah Montana, así como en los otros dos grandes éxitos Disney para adolescentes, la serie de los Jonas Brothers y las películas High School Musical.
¿Por qué unas triunfan y otras no? El profesor de Sociología de la Universidad Ramón Llull Jordi Busquet, autor de Lo sublime y lo vulgar asegura que ésta es la pregunta del millón. "Si hubiera una fórmula mágica, sería fácil elaborar productos atractivos para el gran público y conseguir amplias audiencias", afirma. El sociólogo reconoce que el fenómeno fan se ha adelantado y que cada vez es más normal entre niños de siete u ocho años.
Aunque Patito Feo es internacional, el de Crepúsculo es un fenómeno más amplio. Los cinco libros -con una reciente incorporación tardía, La segunda vida de Bree Tanner- sobre vampiros de la estadounidense Stephanie Meyer llevan 100 millones de ejemplares vendidos en todo el mundo, y 6,5 de ellos en las ediciones en castellano de Alfaguara. Para Javier Ruescas, responsable de su principal web de fans en España y escritor que acaba de publicar su primera novela, Tempus Fugit, "la serie cuenta con una historia de amor adictiva y unos personajes con los que la identificación es fácil: Bella es una adolescente en cuyas preocupaciones se ven reflejadas muchas chicas y Edward es un chico atractivo sin resultar cargante".
Las seguidoras de Crepúsculo tienen en su mayoría entre 15 y 20 años, aunque, como en el caso de otros éxitos literarios adolescentes -como la saga de Harry Potter-, tiene lectores de otras edades. Las fans son tremendamente activas, incluso escribiendo sus propias continuaciones en algunos casos -lo que se conoce como fan fiction- y han encumbrado al protagonista de la serie, el británico Robert Pattinson, como el guaperas del momento.
Sin entradas para Las Populares
Desde esta semana, Patito Feo es un musical que recorre España, ofreciendo 16 conciertos en siete capitales, con el cartel de "no hay billetes" en varias de sus citas en grandes pabellones. Y ello pese a que se anuncia que, del reparto del musical, sólo los dos protagonistas son los de la telenovela original argentina, y el resto es un reparto español. Por cierto, se rumorea también la posible producción de una película en España con todos los actores originales.La protagonista es una chica con problemas de autoestima que se integra en un grupo musical, Las Populares, que compiten con otro de malvadas bellezas, Las Divinas. Según José Vila, de Disney España, "transmite mensajes que defienden que la belleza está en el interior, anima a la audiencia ser positiva, a no dejarse vencer por las adversidades típicas de la edad y enfrentarse al mundo con una sonrisa". En todo caso, hay que señalar que en su exitoso paso por Suramérica, las malas -pero guays- Divinas tienen tantas seguidoras, o más, que sus bondadosas oponentes.